Mientras diversos países buscan un marco regulatorio para la Inteligencia Artificial, la Unión Europea ya dio el primer paso.
Un proyecto de ley para regular la Inteligencia Artificial empezará a ser discutido en la Cámara Europea, y surge de la propuesta presentada por la Comisión Europea en abril del 2021.
El camino de una Ley Europea
Según el especialista en Derecho Digital, Daniel Rodríguez, este proyecto de ley tiene 2 años de discutirse, y lo que ocurrió este miércoles fue la aprobación de un texto final.
Lo que sigue es un triálogo entre la Comisión Europea (el “Poder Ejecutivo” según Rodríguez), el Parlamento y el Consejo Europeo (conjunto de los ministros europeos de Relaciones Exteriores).
Este trámite tomaría 6 meses, para que a finales del año se apruebe una versión final que podría entrar en vigor en 2 a 3 años, a criterio del especialista.
El contenido del proyecto de ley europeo
Dicha propuesta busca fijar estándares de seguridad y derechos fundamentales, con el fin de evitar usos discriminatorios o represivos. El abogado Rodríguez explicó que la regulación europea se basa en riesgos.
“Es decir, el grado de requisitos que deberán cumplir las empresas cuando apliquen o desarrollen o utilicen Inteligencia Artificial dependerá del nivel de riesgo de ese sistema en particular y del contexto en el cual se va a aplicar”, explicó Rodríguez.
Dentro de esos riesgos hay algunos aceptables (sin muchos requisitos), de alto riesgo (se permiten siempre que se cumplan ciertos requisitos), e inaceptables.
¿Cómo se compara esta iniciativa con la costarricense?
A finales de mayo, diputados de cinco diferentes fracciones presentaron un proyecto de ley elaborado por el chat GPT-4.
Para Rodríguez, no hay punto de comparación entre ambas iniciativas, pues mientras el proyecto costarricense se delegó en una IA, el proyecto europeo es producto de un proceso largo, democrático y participativo.
En el trámite europeo han participado diferentes sectores, desde expertos en ciencias de la computación y la IA hasta sociólogos, abogados y psicólogos, lo que hace del proyecto una propuesta robusta y consensuada.
Según el abogado, es posible que el proyecto europeo genere un “efecto Bruselas”: la influencia en las regulaciones de otros países.
La defensa del proyecto en la Asamblea Legislativa
A pesar de los cuestionamientos, los firmantes de la iniciativa defienden el primer paso dado.
Así lo manifestó el diputado oficialista Manuel Morales, quien reconoció que aunque el proyecto debe ser mejorado, se ha dado un paso para iniciar la discusión de un tema innovador.
“Que Costa Rica no maneje plenamente una tecnología no quiere decir que deba ignorar y cerrar el debate”, manifestó Morales.
Según el oficialista, la intención es que el texto sea enriquecido por expertos durante su discusión, mismo criterio que expresó el diputado José Joaquín Hernández, presidente de la Comisión Legislativa de Ciencia y Tecnología.
Hernández expresó que la Inteligencia Artificial implica muchos desafíos, sin embargo, el marco regulatorio es necesario.
“Está demostrado con estudios que para asegurar que los avances tecnológicos beneficien a la sociedad se necesita un marco normativo, por eso con el proyecto de ley 23.771 pretendemos que la Inteligencia Artificial se aplique en Costa Rica con reglas claras”, indicó Hernández.
