Una serie de compromisos, tanto créditos como pagos por depósitos, podrían no estar de acuerdo con el mercado y no se de interés para el banco que absorba activos y pasivos de la cooperativa.
El administrador de la resolución en CS Ahorro y Crédito, antes conocida como Coopeservidores, Marco Hernández, confirmó en Hablando Claro que el Banco Popular ha mostrado interés en formar parte de este proceso.
En Noticias Columbia conversamos con el profesor de la Maestría de Riesgos de la Escuela de Economía de la Universidad de Costa Rica, Vidal Villalobos, sobre este proceso de resolución y las características de la entidad financiera que decida invertir en los pasivos y activos de Coopeservidores.
Según el experto, este banco debe ser solvente y contar con el equipo necesario para asumir este riesgo.
“Una entidad que tenga la experiencia, que tenga la infraestructura, que tenga el músculo, la gerencia y, sobre todo, que tenga el poder de capital para poder traerse esos compromisos a sus estados financieros. Si es una entidad muy pequeñita, no tiene el capital para darle respaldo a los clientes, por eso se habla mucho siempre de que los entes tienen que tener suficiente capital para poder decirle a los clientes ‘yo pongo esto, usted pone eso’ y que el riesgo no esté solamente de un lado, en este caso de los inversionistas”, detalló el economista.
Villalobos explicó que los bancos interesados buscan ciertas características al momento de involucrarse en un proceso de resolución.
Por el contrario, factores como créditos con tasas muy bajas para el mercado u otros elementos pueden no ser de interés de la entidad financiera en cuestión.
“Tienen que ser negocios que a ellos les haga sentido, por ejemplo, Coopeservidores tiene inversiones en en títulos valores del Gobierno y de otras entidades por un monto de 120.000 millones. Si esos títulos están rindiendo bien y están sanos, porque eso no tiene ningún deterioro, usted lo puede llevar al mercado a vender, entonces el banco puede decir ‘deme eso, yo me lo traigo, sin ningún problema’. Es más sencillo, incluso, explicar los 32.000 millones que están en cuentas corrientes de la cooperativa. Eso es plata. Eso no tiene por qué sufrir ningún deterioro, pero la cartera de crédito sí. ¿Por qué? Porque la cartera de crédito podría tener una serie de consideraciones, ‘bueno, yo le di a este crédito a este cliente y me dio esta garantía’ y al banco no le gusta esa garantía, porque tiene otras políticas, entonces ese crédito se podría quedar”, amplió Villalobos.
Finalmente, el economista contó una situación vivida en el proceso de resolución de Coopemex, mientras él se desempeñaba como presidente del movimiento solidarista en dicha época.
Eso sí, mencionó que las condiciones con Coopeservidores pueden ser distintas.
“Hace unos años, cuando estuvimos involucrados en el tema de Coopemex, entró también el Banco Popular y lo que hicimos fue que cambiamos los certificados de depósito de Coopemex por Banco Popular, pero a la gente se le decía ‘usted puede ir a pelear esto a los tribunales o se pasa ya con el banco, pero su certificado era un año, necesitamos darle oxígeno al banco para que se acomode, así que el certificado va a ser a tres años y usted estaba recibiendo un 10%, eso es una tasa muy excesiva con relación al mercado, la que se le puede pagar es un 7%, entonces le cambio ya el instrumento o se va a pelear’. ¿Qué hacía la gente? Se pasaba sin lugar a dudas, pero hasta el último cinco se defendió y no hubo un problema. Es posible que haya algún inconveniente legal en los contratos de inversión que firmaron los inversionistas con la cooperativa, entonces que algunas cláusulas no se puedan mover. Si es así, hay un tema en el Banco Popular porque va a decir, ‘¿Yo por qué voy a pagar una tasa más alta?'”, agregó el experto.
Los aspectos que sean descartados por el banco solvente que asuma la cooperativa, podrían pasar a un fideicomiso y ser posteriormente vendidos para seguir pagando a los inversionistas, según explicó Villalobos.
