Ministro de Hacienda aseguró que el país está en un buen momento para discutir reformas tributarias a régimen especial.
Este país tiene un sistema injusto de recaudación de impuestos, ya que no está equilibrado. Así lo describió el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, durante una conversación en nuestro programa Por Tres Razones.
Para el jerarca, la recaudación en el país sufre de problemas como la evasión y algunas exoneraciones que se aplican y representan una pérdida de ingresos para el Estado, como el caso del régimen especial o de Zonas Francas.
“En este país, hay una dificultad importante. ¿Sabe cuál es el último cálculo de evasión de impuestos? Del 2019. Hay una evasión importante. Hay un gasto tributario importante porque incorpora evasión y también exoneraciones. ¿Sabe cuál es el peor problema del gasto tributario? Las exoneraciones. Son más o menos 4 puntos del PIB que tenemos en exoneraciones. Esos 4 puntos nos darían un superávit financiero. Exoneraciones en el IVA que se le dan a ciertas entidades, a las diferentes empresas que estamos promoviendo, como zonas francas, que tenemos que empezar a discutir con una visión de futuro”, aseguró el ministro.
Según Acosta, el país está en un buen momento para discutir sobre reformas tributarias y también sobre las exoneraciones que se aplican a las empresas ubicadas en zonas francas.
“Nosotros estamos en un momento adecuado para analizar el marco tributario. Estamos estables. Todas las discusiones de reformas fiscales se han hecho en medio de crisis. Ahora, podemos hacer una discusión más reposada, ese análisis en relación con la conveniencia de las exoneraciones en zonas francas, pero no desde un punto de vista recaudatorio, no es agregar recaudación, es como equilibramos la balanza entre quienes soportan hoy los impuestos y quienes los soportarían a futuro. Este país tiene una particularidad y es que tiende a exonerar actividades dinámicas que pueden necesitar ese impulso durante un cierto tiempo, pero que debería desaparecer esos incentivos”, mencionó Acosta.
Por el contrario, para el exdiputado libertario, Otto Guevara, no es conveniente iniciar una discusión para modificar el régimen tributario que se utiliza en las zonas francas.
Para Guevara, la discusión que sí es importante que se dé es si el país debería de convertirse en una gran zona franca.
“A través de ese régimen de zona franca hemos logrado atraer millones de millones de dólares de inversión extranjera directa (IED). Se crean casi 200.000 puestos de trabajo directos y otro montón de puestos indirectos. Hay unos encadenamientos productivos importantes con el resto de la economía”, detalló Guevara.
El exdiputado agregó que “abrir la discusión sobre si se modifica o no se modifica el sistema tributario que se aplica a las empresas de zonas francas, solo ese hecho de abrir la discusión, lo que hace es detener los flujos de IED en zonas francas y también paralizar los proyectos de expansión de aquellas empresas que están hoy en zona franca. Tanto el detener los flujos de inversión como paralizar los proyectos de expansión de empresas que están hoy en zona franca, lo que hace es cerrarle las puertas a nuevos empleos y alejarnos aún más de la meta de reducir la pobreza en Costa Rica”.
De igual manera, el presidente de CINDE, Eric Scharf, aseguró que es necesario que el país se mantenga competitivo de cara a la atracción de inversiones.
“Costa Rica compite a nivel mundial por captar inversión extranjera directa por los indudables beneficios que esta genera al desarrollo del país. Esta competencia no es nada fácil. Todos los países trabajan día con día por mantenerse competitivos, tener elementos de clima de negocios que hagan de sus naciones sedes competitivas para firmas que generan empleo de calidad, conocimiento, encadenamientos y transformación de la economía”, explicó el presidente de CINDE.
Scharf añadió que Costa Rica “tiene un reto actual en varios elementos de su clima de inversión y no puede obviar que el régimen de zona franca es uno de esos puntos que han permitido dar certeza jurídica y competitividad en esta carrera internacional. Es de sumo cuidado el tan solo abrir conversaciones sobre la alteración de condiciones a las empresas que vienen para crecer y generar desarrollo a nuestro país”.
La gerente general de la Promotora de Comercio Exterior (PROCOMER), Laura López, destacó que uno de los puntos fundamentales de la propuesta de valor de Costa Rica, ante la atracción de inversión extranjera directa, es el régimen de zona franca, el cual ha demostrado ser un dinamizador de la economía del país.
Esto ya que, según números de PROCOMER, este genera más de 247 mil trabajos, donde un 44% de los empleos directos son mujeres. Además, las empresas en el régimen compran a empresas costarricenses más de 5.000 millones de dólares en productos y servicios.
“Actualmente, el régimen de zona franca es el responsable del 60% de las exportaciones del país al mundo y del 15% del PIB. Asimismo, da un aporte de más de 1200 millones de dólares a instituciones sociales como la CCSS, FODESAF, INA, INS e IMAS. Por cada dólar que se exonera a una empresa en zona franca, el aporte a la economía nacional es de 1.5 dólares. (…) El régimen es un mecanismo de generación de bienestar en todas las regiones del país que debemos seguir impulsando para que más personas tengan oportunidad de empleo, crecimiento y desarrollo”, expresó López.
Finalmente, el economista, Gerardo Corrales, indicó que en Costa Rica es muy importante el aporte que realizan las zonas francas para el desarrollo, pese a que existen amenazas.
“El régimen especial sigue siendo muy importante para Costa Rica porque muestra crecimientos de dos dígitos, cerca del 12% o 13% por año, especialmente, en la parte fabril o industrial, fabricación de insumos médicos. En la parte de centros de servicios compartidos y de call centers. Sin embargo, hay una serie de elementos que podrían convertirse en amenaza competitiva, especialmente por la gran apreciación del colón que ha hecho que el costo salarial, en Costa Rica, su equivalente en dólares haya subido prácticamente un 31% el último año. Eso hace que el país pierda competitividad respecto a otros países”, aseveró el economista.
