Ministro de Hacienda reconoció problemas para ejecutar presupuestos de infraestructura en el país.
Costa Rica tiene problemas para ejecutar presupuesto en la construcción de obra pública. Así lo reconoció el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, quien este lunes habló con los diputados de la Comisión de Infraestructura en la Asamblea Legislativa.
Acosta señaló que los carteles de licitación suelen tener problemas, lo que suele provocar apelaciones luego de que se adjudican los proyectos. De igual manera, resaltó que las expropiaciones generan atrasos importantes en la ejecución.
“Hay una pobre preinversión. Cuando se hace el análisis del proyecto, tenemos buenas ideas pero malos proyectos. Queremos hacer una carretera pero no sabemos si el trazado es el correcto o no, no sabemos el nivel de expropiaciones para poder cumplir con el proyecto, tenemos problemas de administración e imprevistos que no se toman en consideración. Todo esto atrasa los proyectos”, manifestó el ministro de Hacienda.
Noticias Columbia conversó con el presidente del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), Marco Antonio Zúñiga, para comprender las afectaciones que genera la falta de ejecución de obra pública.
Según Zúñiga, esta situación es preocupante porque los préstamos acumulan intereses que pagar y el país se ve obligado a cancelar multas por los atrasos.
“Para que una empresa venga a un país requiere que la infraestructura sea la adecuada. Nosotros tenemos una afectación muy seria cuando todos los proyectos de infraestructura se atrasan. Pero no solo afecta por la inversión extranjera, también por posibles multas que nos puedan cobrar los entes que nos financian”, el presidente del CFIA.
Para el ingeniero, es necesario que exista una mayor articulación interinstitucional que permita trabajar en mejores carteles de licitación y así evitar problemas en el desarrollo de las obras.
“Esto lo que requiere es coordinación interinstitucional. En Costa Rica existen excelentes profesionales y debemos dejar que ellos trabajen en toda la extensión de lo que conlleva un proceso de licitación. Que se haga adecuadamente, que concursen las organizaciones estatales y las privadas, que podemos colaborar con la asesoría que sea necesaria, de manera que cuando el proyecto salga a licitación vaya blindado contra apelaciones en alguna medida. Este tema nos atrasa en el inicio de la obra”, agregó Zúñiga.
Finalmente, el director ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Construcción, Randall Murillo, afirmó que desde la institución están de acuerdo con lo planteado por el ministro de Hacienda.
Además, agregó que muchas veces los carteles de licitación parecen estar hechos para que algunas empresas los obtengan.
“Los carteles, en una gran mayoría de obra pública, históricamente han estado muy mal diseñados. No solo eso, incluso a veces se hacen dirigidos para que una u otra empresa se los gane, lo que no permite una libre participación, pidiendo requisitos que no tienen ningún sentido o bien estableciendo condiciones que son barreras de entrada para que más empresas participen”, expresó Murillo.
El director de la cámara de construcción reconoció que solucionar esta problemática incentivaría una mayor participación de más empresas constructoras en los procesos de desarrollo de infraestructura.
“Definitivamente necesitamos mejorar sustancialmente la capacidad de gestión. Hay un problema de personas y de capacidad. Las autoridades actualmente, del nuevo Gobierno, están trabajando en eso, según nos han dicho. En el tanto, hagamos la preingeniería adecuada de los proyectos, las licitaciones que sean claras, transparentes y balanceadas. Que pidan los requisitos que se tienen que pedir de acuerdo a los objetivos del proyecto. De esta manera, más empresas van a participar”, finalizó Murillo.
