El jefe de fracción admite que enfrentan el desafió de sacudirse la relación que le da la ciudadanía con los gobiernos de Daniel Ortega y Nicolás Maduro.
Cuando se habla del Frente Amplio en Costa Rica, las primeras críticas que surgen son a su ideología, abiertamente de izquierda.
Muchas personas, incluso, los relacionan con una política similar a la que gobierna en países como Nicaragua, con Daniel Ortega, o en Venezuela con Nicolás Maduro, debido a los acercamientos de los frenteamplistas con representantes de estos países en algunos momentos.
Este es, sin duda, el mayor obstáculo que enfrenta la agrupación en su deseo de llegar a Casa Presidencial; sin embargo, los partidarios del Frente Amplio también lo ven como un ataque sin fundamento a sus aspiraciones.
El jefe de la actual bancada, Jonathan Acuña, aseguró que la historia del partido ha demostrado que están en contra de dictaduras o autoritarismos.
“Los hechos son irrefutables. El Frente Amplio ha participado siempre de la vida democrática, es la vía que hemos elegido y venimos de una izquierda histórica, que siempre eligió los acuerdos políticos”, dijo.
Acuña agregó que las comparaciones con su agrupación y los gobiernos nicaragüenses o venezolanos “son mitos”.
“Hay un gran peso y un discurso anticomunista que se usa electoralmente. No descarto que sucederá una y otra vez, pero es un desafío nuestro ser muy caros y contundentes para deshacerlos, porque hay gente que no tiene límites y no le importa mentir”, afirmó.
El diputado señaló la necesidad de cambiar esta percepción y convencer a los votantes de que sus intereses son distintos de los que se les achacan.
“Tenemos que ser claros y mostrar que somos lo que hemos sido: un partido que cree en la democracia, que respetamos a los adversarios políticos. Puedo ser muy duro con las ideas pero comprendo que tiene cabida, pese a las diferencias políticas”, finalizó.