Jonathan Campos es un educador de Estudios Sociales y Cívica que tiene 17 años trabajando para el Ministerio de Educación Pública de forma interina y espera pronto tener su nombramiento en propiedad.
Actualmente vive en Palmira de Carrillo, sin embargo, cuando empezó a trabajar para el MEP lo hizo en el 2006 en el colegio nocturno de Parrita, pero luego fue movido a Guanacaste.
Desde el 2007 trabaja en el Liceo Nocturno de Liberia cubriendo una reubicación por 9 años.
Aunque él ha buscado opción de estabilidad en cualquier parte del país, el proceso se le ha complicado pues la mayoría de los profesores de Estudios Sociales y Cívica tienen título de maestría y su calificación es hasta de 106, la de Jonathan es de 92. “Yo pensé que era muy buen, pero al final es muy baja”, comentó.
En este momento por temas económicos le es complicado sacar una maestría pues debe atender las necesidades de su familia, tiene dos hijos y a su esposa.
Jonathan señala como una crítica, que ha habido momentos en que se le da propiedad a personas con menos experiencia que él.
Además, desde hace ya varios años en el sistema del MEP había un incentivo llamado “carrera profesional” que no se le estaba pagando desde hace el 2010, y cree que esto también le estaba afectando en el puntaje. Este aspecto ya logró solventarlo.
Él trabaja también en un colegio privado desde hace tres años para poder redondear sus ingresos, aunque se iría a otro lugar del país, pero tienen que darse ciertas condiciones, como la cantidad de lecciones que le permitan pagar los gastos que implica trasladarse.
No pierde la fe de que lo nombren en propiedad, por el momento tiene opción de finalizar el periodo en el Liceo Nocturno de Liberia; pero recuerda que antes de eso, cada diciembre tenía la incertidumbre sobre cuál sería su próximo destino, al que además debía moverse con su familia.
