El economista, Gerardo Corrales, señaló que intervenciones recientes son determinantes para que entidades sean declaradas inviables.
El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) anunció la noche de este miércoles que Desyfin S.A es inviable, por lo que se procedió a iniciar con un proceso de resolución, luego de una intervención ordenada el pasado 13 de agosto.
De esta manera, Desyfin se sumó a Coopeservidores como las dos entidades que sufrieron de esta declaratoria por parte de Conassif durante el 2024, lo cual ha elevado la tensión entre algunos consumidores del sistema financiero formal.
Ante esta posible pérdida de confianza, el expresidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), Rodrigo Cubero, indicó en Noticias Columbia que hay que tener en cuenta que estos fueron dos hechos aislados y que no comprometen el sistema financiero nacional.
«Se trata de un evento aislado, al igual que el de Coopeservidores, se trata de situaciones de irregularidad donde ambas entidades no habían sido transparentes en el manejo de la contabilidad y, sobre todo, de algunas de las pérdidas que estaban generando como consecuencia de créditos morosos y eso es una circunstancia aislada de estas dos entidades. Ocurre en forma casi simultánea por casualidad, pero no se trata de un evento sistémico donde una causa común está afectando a varias entidades del sistema, sino simplemente una coincidencia en el tiempo de dos entidades que estaban manejando mal sus registros contables. Con eso, tenemos dos intervenciones que están resultando en la resolución de las entidades, Me parece que es importantísimo que el público entienda que el sistema está sólido, que no se trata de un evento sistémico, que no hay afectación para las otras entidades y que se trata de fenómenos aislados», detalló Cubero.
En la misma línea se refirió el economista y experto en Banca, Gerardo Corrales, quien señaló que estos casos no tendrían impacto en el resto del mercado financiero.
Eso sí, para Corrales ha quedado claro que cuando las autoridades ordenan una intervención, es posible que esta derive en una declaratoria de inviabilidad.
«Me parece que son dos casos muy puntuales que, porcentualmente, en conjunto representan menos del 3% de los activos totales del sistema financiero y que, por lo tanto, yo creo que no va a haber un efecto de contagio en el resto del sistema. Sí queda una sensación de que la intervención de una entidad financiera, por parte de la SUGEF, pareciera ser determinante en cuanto a que se declare no viable a la compañía», mencionó Corrales.
Finalmente, el economista agregó que las autoridades financieras deben trabajar en que los consumidores tengan confianza en que se den revisiones en las distintas entidades.
«La experiencia da que, estos dos casos, lo que pareciera ser es que no hay alternativa para que los socios actuales capitalicen la entidad para mantener su operación. Eso sí es perjudicial porque podría significar que haya un temor en los depositantes que, si por alguna razón, la SUGEF se hace presente en una entidad, cosa que debería verse como normal, sea ya una señal eventual de que se puede intervenir la entidad. Eso es lo que quizás los entes reguladores y el Conassif deben trabajar más», afirmó el experto.