Tras el inicio del ciclo lectivo 2024, dos personalidades preguntaron acerca de la Ruta de la Educación.
Una legisladora y una exjerarca del Ministerio de Educación Pública pusieron en tela de duda la Ruta de la Educación.
En el marco del reciente ingreso de miles de estudiantes al ciclo lectivo 2024, la diputada liberacionista Alejandra Larios cuestionó el contexto en el cual arrancó el curso.
Dentro de sus críticas, la legisladora hizo alusión a la supuesta inexistencia de la Ruta de la Educación.
“El presupuesto más bajo de la última década, un curso lectivo que inicia sin la tan esperada Ruta de la Educación, que parece que sigue estando solamente en la cabeza de la ministra, un curso lectivo que inicia sin plan de nivelación y 849 órdenes sanitarias, ¿en qué condiciones están aprendiendo nuestras estudiantes? Un curso lectivo que inicia con 4000 nombramientos pendientes, aquí me detengo para que se puedan preguntar cuál es la base para combatir la delincuencia”, aseveró la diputada.
A los cuestionamientos de la legisladora se unió la exviceministra de Educación, Rocío Solís.
Según la exjerarca, docentes le han comentado que no recibieron directrices específicas alusivas a la Ruta de la Educación al inicio del presente ciclo lectivo.
“Lo que ha llegado son unas orientaciones generales para el inicio del curso lectivo, que son las orientaciones que se dan generalmente todos los años al inicio del curso lectivo, pero que se diga ‘esta es la Ruta de la Educación, esto es lo que vamos a seguir, esta es la metodología que vamos a utilizar, estos son los lineamientos, vamos a tener la capacitación para tal fecha’ hasta este momento yo no tengo ningún conocimiento, estoy a la espera de ver que es lo que va a pasar con esta Ruta de la Educación”, manifestó Solís.
Fue en setiembre del 2023, durante el Congreso “Futuro de la Educación” organizado por la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (ULACIT), cuando la actual ministra de Educación, Anna Katharina Muller, manifestó que la Ruta se la inventó ella.
Asimismo, en aquella ocasión cuestionó el fundamento del presupuesto de la educación pública, fijado constitucionalmente como el 8% del Producto Interno Bruto (PIB).
