Una carta firmada por un grupo de ciudadanos y promovida por el diputado del Frente Amplio, Antonio Ortega, pide que se derogue resolución.
Un grupo de la sociedad civil y parte de la comunidad universitaria solicitan, mediante una carta, que se derogue una resolución de la Rectoría de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Esta consiste en la definición de la categoría de directores de oficinas dentro del esquema salarial de la universidad, con el fin de homologar los montos recibidos por estos funcionarios y establecer límites.
Además, la carta pide a la Rectoría que se “abstenga de emitir disposiciones sin el debido sustento legal, técnico y financiero, ni sin el cumplimiento de los procedimientos institucionales correspondientes”, señalaron.
De igual manera, los firmantes solicitan que se apliquen las medidas necesarias para “restaurar el prestigio y la honorabilidad” de la UCR ante los costarricenses, ya que consideran que esta resolución ha sido contraria a dichos valores.
Uno de los que ha promovido esta carta es el jefe de fracción del Frente Amplio (FA), Antonio Ortega, quien pidió dejar sin efecto los alcances de la resolución.
«Desde el Frente Amplio nos sumamos a la comunidad estudiantil, a exprofesores, a pensionados y amigos y amigas de la UCR, que es la gran mayoría del pueblo costarricense, para pedirle a las autoridades universitarias que echen para atrás el odioso acuerdo de homologación salarial para un círculo cercano al rector. Nos parece que los recursos públicos no solo se tienen que atender con una mayor responsabilidad, sino que flaco favor se le hace en medio de una guerra sin cuartel que el presidente Rodrigo Chaves y sus acólitos han emprendido en contra de la educación pública, en contra del conocimiento, en contra de la ciencia, de la evidencia, del arte y de la cultura», señaló el frenteamplista.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la UCR (FEUCR), Artemisa Villalta, lamentó el contexto en el cual se da esta resolución, ya que es tomada como arma político electoral por parte del Gobierno.
«El reciente ajuste salarial dentro de la UCR ocurre en un contexto sumamente preocupante para la comunidad universitaria. Las becas no son suficientes, las condiciones económicas de la comunidad estudiantil son cada vez más precarias y el costo de vida sigue en aumento, mientras los recortes al FEES limitan los recursos que deberían garantizar el acceso y la permanencia en la educación superior pública. Desde la FEUCR hemos sido claros en nuestra posición sobre las decisiones administrativas que afectan directamente a la comunidad universitaria. En la una circular señalamos que ese ajuste responde a la implementación de la Ley Marco de Empleo Público, una normativa que la institución debe aplicar debido a decisiones administrativas previas. Ahora bien, lo que realmente preocupa no es solo el ajuste salarial, sino la dirección que están tomando las decisiones dentro de la universidad y el contexto político en el que ocurren», afirmó la representante estudiantil.
En Noticias Columbia conversamos con el rector de la UCR, Carlos Araya, para conocer su posición con respecto a esta carta.
Según el académico, no existen motivos para derogar la resolución o eliminar los efectos del alcance de la misma.
«Me he enterado de que anda circulando una carta, que incluso vi que algún diputado del Frente Amplio la estaba pasando a diferentes personas para que la firmen, no sé si de la comunidad universitaria o externas. Realmente, yo estoy muy seguro de la legalidad y del interés institucional de la resolución que firmé. De manera que no vemos ningún motivo objetivo más allá del populismo que algunos pretenden para derogar o echar atrás una decisión que, reitero, es de interés institucional, pero además estamos cumpliendo con un mandato del Consejo Universitario apegado a la legalidad y a los estudios técnicos. No veo ningún motivo para echarlo atrás», explicó el rector.
Araya mencionó que de momento no han recibido formalmente la carta, pero aseguró que sí contaron con el análisis correspondiente para firmar la resolución.
El análisis se hizo. De hecho, habían algunos puestos de direcciones que en el mes de diciembre devengaban salarios o montos salariales mucho mayores de lo del tope que se estableció en esta decisión. De manera que esperemos que llegue la carta. Cuando llegue la carta, respetuosamente la iremos a responder y le iremos a anexar los documentos que nos soliciten, de forma tal que quedamos atentos a que la carta ingrese. De momento, no tenemos más que lo que hemos visto en redes sociales», añadió el académico.