La montañista Ligia Madrigal emprendió el viaje de regreso a Costa Rica después de la hazaña de convertirse en la primera mujer costarricense en conquistar la cima del mundo, el Monte Everest en Nepal.
“Y ya voy camino a Costa Rica. A ver a mi familia después de 50 días”, publicó en sus redes sociales, pero enfocándose en un tema específico: la gente que “chotea” su logro aduciendo que recibió excesiva ayuda.
“Quiero escribir sobre un tema. Y que todo quede bien claro. Solamente fui acompañada por un guía a o Sherpa, solamente uno, Dorchi Sherps”, apuntó.
“Como es lo normal y requerido con cualquier aspirante a subir el Everest. Y entonces quiero que veamos esta foto (la que ilustra la presente nota), de mi ascenso a cumbre, que me tomo Dorchi, Me pregunto, en este momento tan complicado, ¿dónde estaban mis 8 o eran 20 Sherpas?”.
“Tal vez uno debería estar ayudandome con el anclaje y la seguridad, hubiera sido genial que otro me llevara ese pesado salveque, que muchas veces tenia ganas de tirar al precipicio, otro tal vez, podría estar limpiando la nieve de mi cara para poder ver mejor. ¿20 Sherpas? A mi me da curiosidad la falta de información de algunos (muy muy pocos, la mayoría si esta bien informados) Y la verdad personalmente no me afecta, estoy acostumbrada a este tipo de situaciones”, agregó la exitosa deportista,
“Pero escribo sobre este tema porque me parece que va mas allá, no sé si seré un poco paranoica. Pero me parece que estos comentarios van dirigidos a minimizar mi trabajo y así minimizar a las mujeres. Es decir, a un hombre sí le creemos que lo hizo, ¿pero la única manera que una mujer lo logre, es con la ayuda de 20 hombres?”.
“No caigamos en estas trampas, ¡Sí! Soy mujer, soy mamá, soy esposa, soy tica, tengo 51 años y con mucho mucho muchísimo trabajo y esfuerzo y un solo Sherpa lo logramos”, finalizó.
