La tensión entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo fue una de las constantes durante este 2023.
Discusiones como los proyectos de seguridad y jornadas 4×3, además de las investigaciones sobre la campaña electoral y ciertas instituciones elevaron el tono entre los dos Poderes de la República.
Noticias Columbia conversó con los jefes de fracción acerca de cuáles fueron, a su criterio, los momentos más tensos del 2023.
Las fracciones de la Unidad Social Cristiana y Frente Amplio coinciden en su opinión: la discusión de jornadas 4×3.
Para el jefe socialcristiano, Alejandro Pacheco, ese debate trajo fuertes enfrentamientos con el Ejecutivo y entre las fracciones.
“Cuando estuvimos aprobando el proyecto de jornadas 4×3 fueron unas sesiones muy tensas, hubo grandes problemas a la hora de comunicarnos con el Ejecutivo, fue una relación muy tensa con las otras fracciones”, indicó Pacheco.
Sofía Guillén, jefa de la bancada frenteamplista, coincidió con los apuntes del PUSC.
La diputada agregó que el Gobierno tensó la agenda de seguridad al ponerla como una competencia entre Poderes.
“Un momento muy tenso fue la discusión de jornadas de 12 horas sin pago de horas extra, ese proyecto de ley que finalmente se viene abajo en la Sala Cuarta por procedimiento fue un debate muy tenso, muy agotador, evidentemente tensó las relaciones entre varias fracciones y creo que hay algunas diputaciones de otros partidos que todavía resienten el resultado; otro momento tenso creo que ha sido ahora con la agenda de seguridad, sería un momento tenso impuesto desde afuera, porque me parece que esa tensión quien la impone es el Presidente de la República cuando decide convertir la agenda de seguridad no en una colaboración entre Poderes para resolverlo sino en una competencia”, explicó Guillén.
Desde el punto de vista del jefe de Nueva República, Fabricio Alvarado, hubo varios momentos tensos, pero todos con un mismo punto de partida: el Presidente de la República.
Alvarado hizo énfasis en la desconvocatoria de los proyectos de seguridad.
“Para mí fue el más tenso cuando el Presidente hace el evento en Guápiles, presenta la ruta de seguridad pero a la vez desconvoca los proyectos que el Poder Ejecutivo había puesto sobre la mesa básicamente molesto”, manifestó Alvarado.
Por su parte, el jefe de fracción de Liberación Nacional, Oscar Izquierdo, no apuntó a un momento específico, sino al año.
El liberacionista manifestó que el trabajo legislativo en general fue difícil por la relación con el Gobierno.
“Hemos tenido un Ejecutivo bastante complicado, donde no ha dado posibilidades de tener un diálogo permanente adecuado y donde cuando hemos ofrecido puentes para el diálogo pues han anunciado dinamitarlos; el léxico que se utiliza por parte del Ejecutivo no solamente con la Asamblea Legislativa sino con los otros Poderes de la República o con los medios de comunicación han sido realmente grotescos, y no son la forma en que estamos acostumbrados los costarricenses a dialogar”, cuestionó Izquierdo.
