El Colegio de Médicos y Cirujanos ha registrado como una ‘epidemia’ el problema con las presas en el país, que afecta la salud de los costarricenses.
El Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica advierte sobre las consecuencias que las presas están ocasionando en el bienestar integral de los ciudadanos.
Según reportaron, existen afectaciones a nivel de salud cardiovascular, física y mental de la población.
Datos del Índice de Competitividad 2024 señalan que 10 cantones destacan entre los que más congestionamientos vehiculares tienen. Estos son: Orotina, Santa Ana, Heredia, Alajuela, Santo Domingo, Escazú, San José, Curridabat, Montes de Oca y Tibás.
El presidente del colegio y especialista en cirugía cardiovascular y torácica, Elliot Garita, calificó la situación como una epidemia que perjudica la salud de los costarricenses.
«Nos aumenta el estrés emocional, nos aumenta la presión arterial, nos aumenta la frecuencia cardíaca, nos disminuye la tolerancia para poder convivir con otras personas y nos acorta los tiempos de poder vivir y de tener estilos de vida más saludables. La ansiedad que se genera cuando se está en una presa que no se moviliza, que necesito llegar a un punto determinado en un horario específico, hace que descarguemos en forma constante adrenalina. Esto me aumenta la frecuencia cardíaca y me aumenta la presión. La cantidad de problemas que esto va a generarme, con el paso del tiempo, es que me va a dificultar el control a pesar de algunos tratamientos, podría disminuir la eficacia de los mismos y no logramos el control de la presión arterial», explicó Garita.
En la misma línea se refirió el presidente de la Asociación Costarricense de Psiquiatría, Francisco Golcher.
El experto brindó una serie de recomendaciones para las personas que tienen afectaciones por las presas que se dan en la mayoría de cantones del país.
«Primero, contar un, dos, tres, cuatro y respirar profundo, hacer ejercicios de respiración. Estamos en medio de una situación de la cual no somos responsables, pero sí somos víctimas de esto y tomarlo como más fácil, más libre en términos de decir, «bueno, ante esto y lo que voy a hacer es relajarme, hacer ejercicios de respiración, poner música clásica para irnos relajando y diciendo, no puedo hacer nada, mejor lo hago lo voy haciendo tranquilo al paso que sea». Si es que tengo una reunión, pues llamo y digo que estoy atrasado porque estoy en medio del caos de las presas de San José. No tenemos por qué estresarnos, porque ¿Qué es lo que pasa con el estrés? Aumentamos el cortisol. Al aumentar el cortisol, aumenta la frecuencia cardíaca, puede aumentar la presión arterial y si ya padecemos de eso, es un factor de riesgo para que tengamos un accidente de salud», afirmó Golcher.
El miembro de la junta de gobierno del Colegio de Médicos y Cirujanos y especialista en medicina del trabajo, Manrique Sandí, se refirió a las afectaciones en la parte física de los conductores o usuarios de transporte público a raíz de las presas.
Según el doctor, es importante tomar en cuanto algunas recomendaciones para disminuir los daños a nivel corporal que pueden presentarse:
- Mover el asiento hacia adelante hasta que se pueda alcanzar y presionar fácilmente los pedales sin tener que estirarse
- Ajustar la altura del asiento para ver cómodamente no solo la carretera, sino también los instrumentos que están en el dash.
- Asegurar que la altura sea la adecuada, de tal modo que las caderas estén alineadas o ligeramente más altas que las rodillas y no colocar el asiento en una posición tan alta, porque entonces eso puede generar mayor impacto en la parte superior del cuerpo, cabeza, sobre todo, y en caso de colisiones puede afectar muy negativamente a la persona.
- Reclinar ligeramente la espalda del asiento en un ángulo de aproximadamente 100 grados.