El Consejo de Transporte Público advierte que la crisis que puede provocar el brusco aumento de los combustibles afectaría a los servicios de autobús con más fuerza.
En un comunicado emitido por la entidad este lunes, se habla de una posible paralización del país y las dificultades de las empresas para seguir operando.
La reacción de la entidad se debe al ajuste de precios, pedido por Recope y bajo estudio de la Autoridad Reguladora. La entidad solicitó el incremento de 87 colones para la gasolina súper y hasta 121 colones para el diésel.
El director del CTP Manuel Vega, advierte de la necesidad de tomar medidas, aunque el alza sea un factor mundial.
Vega llama a la ARESEP a tomar en cuenta los escenarios posibles, incluyendo los aumentos de tarifas en rutas de autobuses.
Esa misma advertencia fue compartida la semana pasada por la Cámara Nacional de Transportes. La vicepresidenta, Silvia Bolaños, recordó que el sector aún se mantiene afectado por los efectos de la pandemia.
Recope señala que son diferentes factores externos los que presionan barril de petróleo al alza, a nivel mundial, llegando a valores históricos de precio para diferentes países, incluyendo potencias como Estados Unidos.
El director financiero de la entidad, Luis Carlos Solera, apunta como uno de los principales el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Los expertos no descartan más aumentos para los próximos meses, inclusive superando la barrera, nunca antes vista, de los mil colones por litros, conforme el conflicto en Europa se extienda.