Pese a las críticas, Catalina Crespo defiende su gestión. Confirmó que no buscará la reelección en diciembre.
La Defensora de los Habitantes, Catalina Crespo, confirmó esta semana su decisión de no buscar la reelección en el cargo, después de diciembre, cuando termina su periodo de cuatro años.
La información la adelantó en mayo en Columbia y esta semana envió la carta oficial a la Asamblea Legislativa.
Los logros
En una nueva entrevista con este medio, Crespo asegura que desde el inicio sabía que su servicio en este puesto era por tiempo limitado y reconoce que en ocasiones es “mejor dejar ir.”
Además, cita al menos tres logros con los que afirma la Defensoría sale “fortalecida y más creíble.”
“Algo tan básico como cuando que cuando yo entré en el 2018 teníamos 22.000 denuncias y hoy dejo una institución con casi 36.000 denuncias recibidas. Eso significa que la gente cree más en la Defensoría,” dijo, además de agregar que los tiempos de respuesta pasaron de dos años a cerca de dos meses como lo establece la ley, y que facilitar los mecanismos para que los ciudadanos se acerquen a la entidad.
Resalta también que, en Centroamérica, la Defensoría costarricense goza de prestigio y que es referente en materia de derechos humanos y temas migratorios que tanto afecta a la región.
Los casos
Criticada por muchos y aplaudida por otros. La gestión de Crespo tuvo puntos altos de atención mediática. Ella asegura que fue la defensora de “todos los sectores.”
Ella se adjudica el caso Upad y haber presentado las denuncias que desencadenaron con el proceso judicial que se mantiene en desarrollo. Se recuerda el ingreso a Casa Presidencial en Zapote.
También otro punto de debate fue su denuncia e intervención ante un aparente uso inadecuado de recursos en el manejo de pacientes y enfermedades VIH.
Crespo defiende que sus actuaciones de control al gobierno de turno fueron luego de revisar las leyes y las potestades que tiene el ente defensor. “Es una institución apolítica,” afirma y advierte que hasta el último día de trabajo será vigilante al trabajo de la nueva administración.
Sobre las críticas que recibe constantes de la comunidad LGBTIQ+, Crespo afirma que fue defensora de la entrada en vigencia del matrimonio igualitario.
“A lo mejor, hubo grupos que no estuvieron de acuerdo en incluir, otros grupos o que, si había un tema electoral ahí metido, yo puse un alto para que un tema no se politizar. La Defensoría siempre apoyó todo, inclusive pedimos cuentas y además exhortamos a la Asamblea Legislativa para el tema de matrimonio igualitario, que eso es un tema sumamente importante.”
El futuro
Catalina Crespo se mantiene seis meses más y el Congreso debe abrir el concurso para nombrar un sucesos o sucesora.
Ella afirma que “independientemente la persona que esté en gobierno, la Defensoría debe seguir pidiendo cuentas,” y espera que el jerarca que la sustituya continúe esa misma línea.
Sobre su carrera política, se ve regresando al exterior. “La idea es poder volver al área internacional que era donde yo vengo. Volver a los organismos internacionales para seguir trabajando por temas de derechos humanos.”
La Defensora presentará el próximo jueves 30 de junio su último informe de labores ante los diputados.
