Alajuelense sacó un 1 a 1 con buen sabor en el Estadio Independencia, sede del Real Estelí, donde ese tanto de visitante lo pone arriba en la final de la Copa Centroamericana porque es criterio de desempate.
El Tren del Norte arrancó con todo, como una verdadera locomotora, arransando con la Liga principalmente por la izquierda, donde Byron Bonilla evaporó cualquier resistencia de Fernando Piñar, a quien el brasileño Canhoto no le ayudó.
En una de esas arremetidas Bonilla se metió hasta la cocina y le puso en el pecho el 1 a 0 a Delis Vargas, quien le ganó el viaje a Ian Lawrence y aprovechó la cacería de mariposas de Leonel Moreira (13′).
Parecía que el Real Estelí anotaría el segundo en cualquier instante, hasta que el VAR lo cambió todo. Se señaló una sujeción de Henry Niño sobre Santiago van der Putten y la pena máxima la canjeó por gol Celso Borges con disparo centralizado (36′).
Vean si es emocional tan emocional el fútbol que la Liga terminó dominando, más cerca del segundo que el equipo pinolero.
La segunda parte fue más trabada, con un Alajuelense que sintió el 1 a 1 bueno por el criterio del gol visitante como fórmula para desempatar en caso de paridad, así que la contienda transcurrió con dominio nicaragüense sin «punch».
Al final los locales salieron enojados por una mano de Ian Lawrence dentro del área que no fue pitada como pena máxima, considerando que contra ellos fueron rigurosos y en cambio laxos con Alajuelense.
La serie se cierra el próximo miércoles a las 7pm en el Estadio Alejandro Morera Soto.