Para los qataríes, representan prestigio, al punto de que hay hospitales para halcones. Costarricenses que residen en el país explican las particularidades que viven con este lujo único, “llegué a ver ocho en un vuelo”.
¿Se imagina pagar por un ave 18, 50 o hasta 70 millones de colones? Esta realidad, tan lejana para Costa Rica, es muy común entre los habitantes cataríes cuando se habla de los halcones, considerados un símbolo de estatus en ‘medio oriente’.
Básicamente, el qatarí de dinero compra un halcón para participar en competencias de ‘caza’ en el desierto.
Incluso, viajan por todo el emirato para asistir a los populares eventos.
La dinámica consiste en soltar una paloma, y unos segundos después al halcón, que volará para perseguir al ave y la convertirá en su presa, para luego regresar con su dueño.
El fenómeno de los halcones es muy particular en Qatar, y a los ticos que residen allí les ha tocado mirarlo de cerca.
‘Columbia’ le consultó a dos ticos que residen en la próxima mundialista sobre las particularidades de esta ave.
Por ejemplo, Diego González trabaja como director de operaciones en una aerolínea qatarí desde hace 10 años y, por lo tanto, ha visto de cerca uno de los hechos más llamativos.
Contó que llevar un halcón en el brazo es una tradición tan arraigada, que las aerolíneas autorizan a los dueños para que las puedan llevar en su brazo durante los vuelos. Es decir, el qatarí se sienta en su espacio dentro del avión y el halcón está encima de su brazo.
“Es increíble, llegué a ver ocho halcones en un vuelo. Son carísimos y al que lo tiene le da prestigio”, explicó González a ‘Columbia’.
Otro hecho llamativo es que en el país hay ‘hospitales del halcones’.
Es tal la popularidad, que el halcón necesita muchos cuidados y, por lo tanto, existen centros médicos especializados en cuidar la salud de estas aves.
El halcón es un ave ‘rapaz’, que destaca por sus garras muy largas y fuertes con las que atrapan a su presa.
Tienen, además, un pico duro y grueso.
