Se dedicaba a la pesca y estaba retirado del fútbol cuando su formador y ahora técnico lo convenció de dejar la caña de pescar y regresar a las canchas, solo que esta vez para defender los colores del ‘otro’ puerto, Puntarenas. Todavía de vez en cuando camina al estero junto a Johnny Gordon para ‘tirar la cuerda’.
Cuando el técnico Horacio Esquivel lo llamó por teléfono, el delantero limonense Steven Williams ya se había retirado del fútbol y tenía siete meses de dedicarse a la pesca.
Esquivel, quien conoce al atacante desde que estaba en escuela de fútbol, lo invitó a reforzar su proyecto deportivo, como lo hizo con Johnny Gordon, JeMark Hernández y Yorseth Hernández, todos exfutbolistas suyos en Limón FC.
Williams lo meditó con la almohada y aceptó la invitación de “su padre futbolístico”.
Y el pasado domingo le cumplió con creces.
El artillero anotó el único gol porteño en el juego de ida de la final de la Liga de Ascenso frente a Carmelita (1-0), su octava anotación en la campaña y este domingo buscará sellar el ascenso a la máxima categoría.
“Estaba pescando cuando me llamó Horacio. De hecho por ahí están los jefes que tenía allá. Y bueno, el profe me convenció, sonaba bien el proyecto y decidí venirme”, dijo.
“Yo no quería más con el fútbol, porque sentía que había acabado mi momento, pero no, es hasta que Dios quiera”, añadió Williams.
Sobre su faceta de pescador, reconoce que le iba bien antes de volver al fútbol.
Incluso hoy en día, le gusta ‘lanzar la cuerda’ junto a Gordon.
“Me la juego, pescaba unos siete por día. Me gusta bastante, salgo con mi compañero Johnny, que a él le gusta tirar cuerda, nos vamos al estero”, concluyó.
