Al terminar el encuentro en el estadio Alejandro Morera Soto, jugadores manudos y florenses se pegaban a puño cerrado en frente a un estadio enfurecido por el resultado rojinegro.
Agresiones físicas y verbales se vivieron en la Gran Final del Apertura 2024, tanto que 600 policías de la fuerza pública, oficiales de seguridad privada y demás personeros intervinieron en el altercado.
En la llamada ‘Catedral del Fútbol’, este viernes se presenció violencia, agresión e insultos por parte de jugadores e integrantes de los cuerpos técnicos y aficionados. Mientras los jugadores rojiamarillos trataban de celebrar su campeonato 30, algunos futbolistas y personeros de Alajuelense trataron de impedírselos.
La Unafut tuvo que realizar la premiación en la parte de los camerinos, ya que buscaba la seguridad de los jugadores, cuerpo técnico, administrativos, prensa y todos aquellos que se iban a hacer presente. La Unafut comunica que esos actos son inaceptables y que van en contra de los valores del respeto.
Por otro lado, la Federación Costarricense de Fútbol también se comunicó por lo sucedido este viernes 27 de diciembre y dijo lo siguiente: “El fútbol es entretenimiento, pasión y está llamado a influir de forma positiva en nuestra sociedad, por eso no justifica de ninguna manera lo ocurrido hoy”.
Los jugadores de Alajuelense no dieron declaraciones de ningún tipo, tampoco el DT mientras que de parte de la administración manuda tampoco. En Herediano sí dieron declaraciones pero todo estuvo lleno de felicidad y celebración por el campeonato obtenido.
