Agentes buscan indicios para la ampliar la investigación. Cuatro hombres fueron detenidos este martes como sospechosos.
Oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizan la mañana de este miércoles cuatro operativos en las localidades de Limoncito y Envaco.
Los allanamientos están relacionados con el caso de homicidio que ocurrió este martes en el hospital Tony Facio, en el cantón central limonense. Sujetos armados ingresaron al centro médico para dar muerte a un hombre que estaba internado.
Tras una rápida respuesta de la Fuerza Pública, cuatro sujetos fueron detenidos. Son sospechosos de estar vinculados directamente con la ejecución y la logística del crimen, indicó el jefe del OIJ de Limón, Esteban Obando.
“Como parte de las acciones conjuntas y en los rastreos en los diferentes lugares cercanos al hospital se lograron ubicar tres armas de fuego que presuntamente fueron utilizadas por los detenidos para la ejecución del caso y el decomiso de un vehículo que sería el utilizado para huir del lugar”, indicó Obando.
El ministro de Seguridad, Mario Zamora, dijo que este caso demuestra la crudeza de la lucha entre grupos criminales en el país. Insistió en que se trata de una “mexicanización”, es decir que se copian patrones de organizaciones criminales de ese país.
“Sabemos que es una banda que está haciendo acciones con una persona de una banda adversa que había sido previamente herida y estaba recibiendo atención médica en ese centro hospitalario. Celebramos que se haya podido detener a los responsables”, expresó.
“La lucha entre bandas está generando en Limón ese tipo de resultados pero, la inmediata aprehensión demuestra que las capacidades de reacción instantánea de la Policía se dieron”, añadió.
Riesgo para centros médicos
Las disputas entre personas vinculadas con el crimen organizado están afectando a centros de salud del país.
Cuando hay balaceras y algunos sospechosos sobreviven a los ataques, aparece el riesgo de que sus enemigos intenten volver a agredirlos cuando están vulnerables en hospitales o clínicas.
En enero pasado, un hombre armado ingresó a la parte trasera del hospital Monseñor Sanabria, al parecer con la intención de atacar a un paciente. Sin embargo, el sujeto se fue y el asunto no tuvo consecuencias que lamentar.
El ministro Zamora mencionó que este año la Policía ha atendido alertas para cubrir el perímetro de otros centros médicos en Quepos y Jacó. Fueron casos en los que no hubo incidentes dentro de los establecimientos pero sí fue necesario dar resguardo a las zonas aledañas.
