Recientes manifestaciones de la bancada liderada por Fabricio Alvarado no gustaron entre los frenteamplistas, quienes decidieron tomar acciones para contrarrestar a los neorepublicanos.
Los debates y críticas por temas religiosos volvieron a la Asamblea Legislativa, esta vez de la mano de los diputados del Frente Amplio y de Nueva República.
Ambas bancadas han mostrado la disparidad de sus criterios sobre diversos temas, desde sociales hasta económicos, aunque ahora el tema tomó un tinte de creencias y fe.
Durante setiembre, en partido Nueva República impulsó el mes de la Biblia en el Congreso. Según el jefe de bancada, Fabricio Alvarado, “la palabra de Dios es fuente de vida. Y la Biblia es mucho más que un manual religioso, también es una herramienta para hacer bien nuestro trabajo”.
Por esta razón, se realizaron algunos espacios para hablar del tema en la sede del primer poder de la República, concluyendo el viernes con un encuentro especial.
Estas situaciones molestaron a los diputados del Frente Amplio. Quien alzó la voz por el partido fue la legisladora Rocío Alfaro, quien acusó a los neorepublicanos de hacer un uso inadecuado del Congreso para promover sus ideas.
“Ante los intentos de Nueva República de convertir la Asamblea Legislativa en un espacio dedicado a la ritualidad religiosa e imposición de sus criterios fundamentalistas en nuestro quehacer, levantamos en esta curul (la) necesaria bandera por un Estado Laico”, escribió Alfaro en sus redes sociales.
El reproche de los frenteamplistas no pasó desapercibido para el diputado Fabricio Alvarado, quien en la misma vía contestó a las posiciones de Alfaro y sus compañeros de bancada.
“Estos son los que andan pregonando la tolerancia, eso sí… en una sola vía. Aún si Costa Rica fuera un Estado aconfesional (no ateo como pretende el Frente Amplio) celebraríamos el día de la Biblia porque es ley de la República y porque defendemos la #LibertadReligiosa”, escribió Alvarado, acompañado de la publicación de la frenteamplista.
