Mario Zamora se refirió a las recientes balaceras en locales comerciales. «Son genuinos actos de terrorismo», dijo ante consulta de Noticias Columbia.
El ministro de Seguridad se refirió este martes a los tiroteos que han ocurrido recientemente en sitios comerciales como dos bares capitalinos y una sala de juegos en Nicoya, Guanacaste.
En estos casos, los sicarios abrieron fuego para acabar con la vida de su víctima, sin embargo, atacaron de forma indiscriminada y terminaron matando, hiriendo o poniendo en riesgo a otras personas que no tenían nada que ver con el conflicto.
Zamora afirmó que «el crimen organizado a través de sus sicarios cada vez está siendo más agresivo, va ‘in crescendo’ (aumentando progresivamente) en la zonas en donde operaba».
«Normalmente lo hacía en zonas alejadas donde normalmente las víctimas eran atrapadas en solitario y sin la posibilidad de pedir auxilio. Hoy están aumentando su agresividad social; pero con esto también están dando un mensaje de amedrentamiento a la población porque se convierten no solo en homicidios sino en genuinos actos de terrorismo donde generan pánico y terror en las personas», expresó ante la consulta de Noticias Columbia.
El jerarca de Seguridad recordó que en este momento, en la Asamblea Legislativa se discute una ley contra sicariato e insta a los diputados a que consideren la imposición de «la pena máxima» a este tipo de sicarios «que mediante sus actos homicidas generando pánico y terror en la población, gracias a acciones cada vez más violentas en recintos públicos».
Cuando se le preguntó a Zamora a qué se refería con la pena máxima, dijo que los 50 años de cárcel que establece la legislación costarricense como el tope para descontar en privación de libertad.
Actualmente hay dos expedientes en trámite en la Asamblea Legislativa que están relacionados con el castigo del sicariato. El proyecto 24.471, de Gilberth Jiménez y Gloria Navas, se presentó el 30 de julio y está en Comisión de Seguridad. El plan reforma la Ley contra la Delincuencia Organizada y en uno de sus artículos establece:
«Se impondrá pena de prisión de veinticinco a cincuenta años, siempre que, y cuando la pena obtenida del concurso de delitos no supere los cincuenta años, a quien: Dé muerte a una persona por encargo o acuerdo, con el propósito de obtener para sí o para un tercero un beneficio material, económico o personal».
También está el proyecto 24.047 del diputado David Segura que se presentó el 20 de noviembre de 2023 y consta de una reforma al Código Penal. Fue dictaminado en comisión pero mantiene trámite de mociones.
Uno de sus artículos dice:
«Quien mate a otra persona, por precio, pago, recompensa, promesa remuneratoria u otra forma de beneficio económico, para sí o un tercero, será sancionado con pena de prisión de veinte a treinta y cinco años».
Motorizados
Autoridades del OIJ y el Ministerio de Seguridad Pública tienen claro que las motocicletas son utilizadas por personas de bien para trabajar o trasladarse a distintos sitios, sin embargo, este tipo de vehículo también se usa con mucha frecuencia para realizar sus ataques armados.
La estadísticas de la Policía Judicial revelan que, en el 2022, hubo 106 homicidios cometidos por ocupantes de motos y en el 2023 fueron 192.
El ministro de Seguridad, Mario Zamora, comentó que él está a favor de que los motociclistas tengan que una identificación especial que consiste en portar un chaleco reflectivo que tenga el número de placa.
«¿Cómo es posible que cuando detectamos que la mayor parte de sicarios opera en motocicletas, el país sigue de brazos cruzados sin hacer nada al respecto?», manifestó.
Zamora alega que el uso de chalecos facilitaría la identificación de este tipo de personas dedicadas a los homicidios por encargo.
Escuche aquí las declaraciones completas:
