85 funcionarios del Tribunal Supremo de Elecciones trabajan 16 horas para completar las tulas con el material electoral, es decir los sacos que se envían a las juntas receptoras de votos.
Para el 20 de enero terminará todo el proceso de empaque de casi 30 materiales que se incluyen, como las papeletas, patrón electoral, material de apoyo para personas con discapacidad y cualquier otra herramienta necesaria.
En esta ocasión, por la pandemia, se incluyen elementos de higiene como alcohol y mascarillas para los miembros de mesa y personal. Se intensificará el uso de alcohol para el lavado de manos, pero se aclara que no es requisito para votar o ingresar al centro educativo.
Al 22 de enero, todas las tulas, que se distribuyen en 12 rutas, deben estar en las juntas cantonales, bajo custodia y con monitoreo. “Nunca se ha pedido una Tula, puede que lleguen tarde porque la persona se durmió o no tenía transporte, pero siempre llegan,” informó el director de Registro Electoral, Héctor Fernández.
Al 29 de enero, todo el material debe estar en manos de los encargados de las juntas receptoras.
El material para la Isla del Coco, el lugar más lejano del país, sale este viernes a Puntarenas y luego se traslada en una embarcación. Desde el 11 de enero se enviaron las papeletas para la elección presidencial hacia 42 países en donde se habilitan 52 consulados para el voto de costarricenses en el exterior. Ya 7 confirmaron el recibido.
La preparación del material se realiza en una bodega ubicada en San Rafael Arriba de Desamparados, con todas las medidas de seguridad.
