Ocampo explicó todas las aristas posibles en relación a la elección del nuevo jerarca de Alajuelense. Aunque se daba por un hecho que habría elecciones en noviembre, lo cierto es que hay otras cartas sobre la mesa que cambiarían esta realidad.
A pesar de que se daba por un hecho que en noviembre próximo habría nuevas elecciones presidenciales en Alajuelense, el jerarca Fernando Ocampo explicó que esto podría no suceder y, por el contrario, hay dos alternativas sobre la mesa.
Tiempo atrás, la Asamblea aprobó unos estatutos para modificar la fecha de la elección, de manera en que se pasara para mayo del próximo año.
Desde la perspectiva de Ocampo, este cambio se solicitó dado que es mucho más prudente asumir la gestión del club en ese momento que a finales de este año.
Por lo tanto, en la actualidad se encuentra en el Registro el trámite para el cambios en los estatutos.
En caso de que el Registro apruebe esta modificación, la elección no se haría en noviembre, sino hasta mayo del 2023. Eso haría que la presidencia del equipo en ese periodo de tiempo (entre noviembre y mayo), quede en manos de Joseph Joseph, hoy vicepresidente de la institución.
Pero, ¿por qué Ocampo no seguiría hasta mayo? El hoy jerarca explicó que su mandato termina oficialmente en noviembre y, por motivos laborales, terminaría sus funciones para dedicarse a otros proyectos.
Por lo tanto, Joseph asumiría la cabeza de la institución durante estos meses.
Ahora, en el hipotético caso de que esto suceda, en mayo del próximo año habría elecciones y Joseph podría aspirar a continuar en el cargo. Semanas atrás, el empresario afirmó que no se quería referir al tema todavía.
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Opción 2. Sin embargo, también existe otra opción, y es que el Registro no apruebe los estatutos antes del mes de noviembre y, por lo tanto, habría que realizar la asamblea para elegir al nuevo presidente como estaba dispuesto originalmente.
“Tengo la tranquilidad de que quien siga en Alajuelense viene a aportar a un proyecto muy sólido, con una estructura administrativa, financiera y deportiva muy robusta, que sin duda alguna tiene que ajustar, pero que dentro de esa base creo que va a poder construir”, afirmó Ocampo.
“Yo que entré aquí en otras condiciones, puedo estar seguro que con las bases que estamos dejando, se puede seguir haciendo un gran trabajo”, apuntó.
