Los expertos advirtieron de una semana muy lluviosa y los pronósticos se cumplieron.
En las próximas horas, los aguaceros serán más intensos por la onda tropical 12 y se le sigue la pista, desde hace varios días, a la 13, que tiene potencial de tomar fuerza y ser tormenta tropical.
Ante una serie de informaciones imprecisas que se comparten en redes sociales, Columbia le consultó al Instituto Meteorológico Nacional.
El experto, Daniel Poleo, explicó que por ahora es poca la posibilidad de que se convierta en huracán.
“Realmente hay poca posibilidad de que se convierta en huracán, en estos momentos, por lo menos en la trayectoria que está manteniendo y con las temperaturas del océano, en este caso del Mar Caribe y con el viento que se mantiene se impide que se fortalezca más allá de tormenta tropical. Entonces es una buena noticia en cuanto a vientos porque nos estaría afectando únicamente con fuertes precipitaciones sin embargo, el hecho de que se atormenta tropical, no significa que la afectación va a ser menor,” aclaró
Aunque no llegue a ser huracán, no quiere decir que no haya que prestarle atención. Las lluvias serán fuertes en el Pacífico, Zona Norte e inclusive el Caribe.
“En la parte norte del país y en el Pacífico Central y Pacífico Sur eventualmente, estaríamos teniendo montos que pudieran superar los 100 y 150 milímetros en algunos sectores. Lo podemos comparar con la lluvia de un mes en el Caribe Norte en julio llueven alrededor de 350 milímetros. Entonces casi una tercera parte de la lluvia que normalmente se registra durante todo un mes.”
Las condiciones para el fin de semana son muy diferentes a la realidad del Huracán Otto en 2016.
“La trayectoria va a ser un poco más al norte de lo que fue el huracán Otto. Hay que recordar que el huracán Otto fue uno de categoría 3 y además de ello, este impactó directamente en Costa Rica entonces no estamos previendo el impacto directo como tal sin embargo, es muy probable que las precipitaciones y sean bastante fuertes.”
El aumento de lluvias será para el viernes y sábado. Se espera que el fenómeno tenga un impacto indirecto sobre Costa Rica y pude ser más fuerte para Nicaragua y Honduras.
