Jerarca de Justicia no ocultó su molestia con una decisión judicial con respecto a un funcionario investigado por introducir droga a la cárcel La Reforma el pasado lunes.
El ministro de Justicia, Gerald Campos, expresó su inconformidad por una decisión judicial que dejó sin ningún tipo de medidas cautelares a un oficial de la Policía Penitenciaria sospechoso de ingresar droga a la cárcel La Reforma el pasado lunes.
Al hombre, de apellido Rojas, le decomisaron un paquete con 349 gramos de cocaína. Lo llevaba oculto entre la faja y el pantalón según informó la institución.
En entrevista con Noticias Columbia esta mañana, el ministro Campos, calificó como inaceptable, inapropiado e inoportuno que, a nivel judicial, se permita que el funcionario regrese al trabajo cuando se le atribuye un hecho grave.
“Esta situación a nosotros, dentro del Ministerio, en conversación con los viceministros, nos preocupa porque estamos en una lucha de frente contra todo acto de corrupción y a mí me parece totalmente inaceptable que si logramos detectar a un policía penitenciario que está ingresando droga, lo cual vemos grave, lo cual no vamos a permitir, se lleve (al oficial) al Sistema Judicial y simplemente nos lo regresen y lo tengamos que poner a trabajar”, afirmó Campos.
El ministro indicó que, de momento, se enviará a vacaciones al funcionario policial junto a otro que fue sorprendido con un router oculto en un bolso y a quien se le abrió un proceso administrativo.
“Yo creo que no hay compatibilidad entre las funciones de un policía, cuando este policía comete un delito en ejercicio de su cargo y en ese sentido, deberíamos de contar con los mecanismos necesarios para, como contención, que se le impida volver a ejercer las funciones que estaba desarrollando en el momento en que cometió este delito”.
“Como esto no se da, ordené ayer que se hiciera el estudio correspondiente y se sacara a las personas a vacaciones, mientras iniciamos el proceso disciplinario a lo interno y ver dentro de la normativa si tenemos alguna posibilidad de suspensión”, añadió.
El jerarca dijo que, con estas decisiones judiciales, se envía un mensaje contradictorio pues la posición del Ministerio es no tener tolerancia ante posibles hechos de corrupción.
“No se puede tolerar que funcionarios públicos sean corruptos, pero más aún, funcionarios de un cuerpo policial, que ha sido detectado por el mismo cuerpo policial y que, en ese sentido, trasladamos a otro Poder para que se encargue del Proceso Penal pero simplemente después tengamos el inconveniente de tenerlo que admitir nuevamente en sus funciones, lo cual consideramos inapropiado, inoportuno y, por eso es que de manera urgente tuvimos que tomar otras medidas”, recalcó Campos.
El policía investigado, de apellido Rojas, tiene 11 años de servicio. Enfrenta un proceso de Flagrancia en Tribunales de Alajuela y el Poder Judicial confirmó que fue citado a una audiencia el próximo 13 de julio a las 6:30 p.m.
El Ministro confirmó el inicio de un proceso disciplinario que debe cumplir con el debido proceso, es decir, el traslado de cargos y la garantía del derecho de defensa de los implicados. La intención es determinar si los hechos califican para que se imponga una sanción de despido.
¿Por qué no se solicitaron medidas?
Noticias Columbia consultó a la Fiscalía qué sucedió en el caso del oficial sospechoso de introducir droga a un centro penal. Por escrito, nos informaron que a Rojas le tomaron los datos de identificación, como parte de las diligencias de investigación.
La respuesta agrega lo siguiente:
“Tras valorarse los arraigos procesales (laboral, familiar y domiciliar), así como que la persona sospechosa no cuenta con antecedentes penales, se determinó que, por ahora, puede continuar apegada al proceso, sin la necesidad de cumplir medidas cautelares. Lo anterior, por no existir, hasta este momento, peligros procesales que pongan en riesgo el desarrollo del caso.
La Fiscalía indicó que no existe algún procedimiento administrativo relacionado con este caso”.
