Golpes entre jugadores, aficionados y miembros de seguridad fue el común denominador del pospartido que coronó el título florense.
Con el pitazo final del encuentro entre Alajuelense y Herediano y la campeonización florense, la bronca inició en la cancha del Morera Soto.
Golpes entre jugadores, aficionados y miembros de seguridad fue el común denominador del pospartido que coronó el título florense.
Fuerza Pública dio la orden de que la premiación debía darse a lo interno del Morera Soto y no en la cancha.
«Ante los bochornosos hechos que se presentaron a lo interno del estadio de Liga Deportiva Alajuelense, Fuerza Pública recomienda a la Unafut no realizar la premiación en la gramilla», dijo Freddy Guillén, director de Operaciones de la Fuerza Pública en declaraciones suministradas por el departamento de prensa del Ministerio de Seguridad Pública.
Sin embargo, Herediano desobedeció la indicación que no ir a la cancha y fue a celebrar con el trofeo en mano, eso provocó otra bronca tras la salida de jugadores, miembros de cuerpo técnico y dirigentes manudos que buscaban impedir la vuelta olímpica de los florenses.
En medio de la celebración de Herediano, las luces del estadio Morera Soto fueron apagadas.
*Foto: Yashin Quesada para Radio Columbia 98.7 FM.
