Tras varios años de ausencia en las asambleas nacionales del Partido Liberación Nacional, los expresidentes Óscar Arias y José María Figueres captaron la atención de los participantes en el encuentro nacional.
Sergio Araya y Kattia Benavides, ambos politólogos, aseguran que el papel de estos expresidentes en la agrupación es el figuras de experiencia y acompañamientos dentro del partido, ya que en este momento los liberacionistas se encuentran en un periodo de renovación que está a cargo de las dirigencias del partido.
“Considero que el papel que deben realizar los expresidentes en el partido es de acompañamiento y consejo. La experiencia con la que cuentan tanto a nivel nacional como internacional no se debe desaprovechar”, dijo Benavides.
Por su parte, Sergio Araya aseguró, “esa voz de la experiencia que puede alimentar el espíritu y que le puede dar un balance a las acciones de reestructuración o de renovación que la dirigencia le quiera impregnar al actuar del partido”.
Para el nuevo secretario general del PLN, Miguel Ángel Guillen, era de vital importancia contar con el apoyo de ambos expresidentes.
Es habitual que cada uno de ellos brinde su colaboración a distintos candidatos, lo que evidencia la división de tendencias dentro de la agrupación política. Sin embargo, en esta ocasión no sucedió así.
“Una de las condiciones es que yo me iba a proponer sumar el apoyo de don José María Figueres, pues yo tengo una relación muy cercana con don Óscar Arias de muchos años y por eso lo daba por descontado, que si me sentaba con Don Óscar podía obtener su apoyo y así fue, pero quería hacer un esfuerzo con el expresidente Figueres para que en la secretaría general concurrieran estos apoyos tan determinantes“, apuntó Guilén.
En cambio, el nuevo presidente de la agrupación, Ricardo Sancho, indicó a Noticias Columbia que si bien se necesita ayuda de todas las figuras predominantes del partido, les pide que dejen trabajar al nuevo comité ejecutivo.
“El concurso de todos es necesario, pero que obviamente dejen trabajar este equipo que estoy dirigiendo yo como presidente del partido“, apuntó.
Este comité ejecutivo tendrá funciones por los próximos cuatro años, por lo que le corresponderá asumir el reto de posicionar a los liberacionistas en los próximos comicios municipales y las elecciones presidenciales del 2026.
