(Aquí Doha)- El Mundial de Catar está generando muchos cambios en los banquillos de las selecciones. Los últimos estrategas en irse fueron Tite y Louis Van Gaal. Esto pasa mientras otros como el de Costa Rica, llegaron ‘blindados’ más allá de lo que pasara en los partidos.
El Mundial de Catar ha generado importantes repercusiones en los banquillos de las selecciones. Ya son siete entrenadores los que oficialmente han dejado sus puestos.
Algunos se van porque renuncian, otros porque los despiden, pero lo cierto del caso es que no siguen en sus cargos.
De momento, los estrategas ya confirmados que no continuarán en sus puestos tras la participación en el Mundial son:
Luis Enrique (España), Gerardo Martino (México), Paulo Bento (Corea), Roberto Martínez (Bélgica), Otto Addo (Ghana), Tite (Brasil) y Louis Van Gaal (Países Bajos).
Eso sí, cabe destacar que, la posición de los entrenadores no ha sido igual. Hay algunos que llegaron a Catar ‘blindados’ y su continuidad no dependía de los resultados obtenidos.
El mejor ejemplo de lo anterior y que lo vivimos en nuestro país, fue con el estratega Luis Fernando Suárez. La Federación Costarricense de Fútbol indicó previo al Mundial que renovaban al DT cafetero hasta el año 2026, por lo que pasara, lo que pasara, continuaría en sus funciones.
Y, así fue, los resultados de la ‘Sele’ fueron malos pero no ocurrirá nada con el cuerpo técnico. El primer partido lo perdió ante España 7 a 0, luego venció a Japón 1 a 0, y en último choque perdió ante Alemania 4 a 2. Último lugar del grupo, eliminados y finalizamos en la posición 27 del Mundial.
Empero, el propio presidente de la Federación, Rodolfo Villalobos, confirmó en Columbia después de la eliminación que ‘esta es una Federación seria, se trabaja con planeamiento’ y descartó por completo un posible cambio de entrenador.
Volviendo al tema global de la justa planetaria. Quedan algunas Selecciones con vida y veremos cómo sigue el ‘baile’ en los banquillos.
Algunos despedidos, otros se van ellos… y están los que llegaron a Catar protegidos, sin importar el resultado que obtuvieran.
