La eliminación del uso de mascarillas en algunos lugares de centros de salud es la última medida de la actual administración sobre la COVID-19.
Escrito por Uriel Tercero Trujillo | Convenio ULatina
El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves Robles, desde su primer día al mando en la administración del país, ha sido protagonista por tomar decisiones de salud pública en plena pandemia.
El 8 de mayo, Chaves firmó tres decretos, dos de ellos con relación a la salubridad pública, los cuales fueron cuestionados por diferentes sectores, especialmente en el campo de la medicina.
Uno de los decretos firmados fue la eliminación de la obligatoriedad de la vacuna contra el COVID-19, medida que libró a los funcionarios públicos del despido de su trabajo por no optar por la inyección ante el virus.
De igual forma, el siguiente decreto eliminaba del uso obligatorio del cubrebocas, pero con excepciones, ya que el mandatario explicó que la vigencia de la mascarilla se mantenía al ingresar a un centro médico.
Los únicos empleados públicos que tenían que seguir con la obligatoriedad de vacunas y cubrebocas eran los funcionarios de primera línea de atención médica, es decir, personas con trabajos relacionados al tratamiento de pacientes.
Dos años y un mes después desde el primer caso de COVID-19 en el país, Chaves, el 10 de agosto del 2022, decretó el fin de la emergencia sanitaria, cuestión que expertos calificaron como arriesgado, puesto que afirmaban que la pandemia no había desaparecido.
El jerarca del país afirmaba que los casos por el virus iban siendo controlados, los hospitales no estaban colapsados por pacientes con COVID-19, por lo cual era hora de pensar en postpandemia.
Sin embargo, cuando el panorama olvidaba las medidas sanitarias, la mascarilla volvió a ser obligatoria por dos semanas en centros educativos y en el transporte público. El 17 de octubre del 2022, debido a un informe del Hospital Nacional de Niños (HNN), donde se mostraba el aumento de infantes con enfermedades respiratorias graves y agudas, se impuso de nuevo la utilización del cubrebocas. La medida finalizó ejecución el 31 de octubre.
Por la misma situación presente en el HNN, la entonces ministra de Salud, Joselyn Chacón, anunció el “receso lluvioso”, concepto que comunicaba que, desde el martes 11 de octubre, hasta el viernes de la misma semana, los centros educativos de primaria y secundaria permanecían cerrados.
La excepción eran los alumnos de Colegios Técnicos, puesto que necesitaban realizar la prueba escrita comprensiva estandarizadas de especialidades técnicas, la cual estaba estipulada para el 14 de octubre.
La última medida sanitaria que ha tomado el Ministerio de Salud es eliminar el uso de mascarillas en algunos lugares de centros de salud.
Mediante un comunicado, indicaron que los espacios son: pasillos, ascensores, servicios de alimentación, atención ambulatoria y consultas externas por infecciones no respiratorias.
La decisión viene condicionada por el anuncio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que el pasado 5 de mayo del presente año, anunciaron que la pandemia ocasionada por el COVID-19 ya no es una amenaza global.
