Madre de joven que murió en accidente aéreo en Pico Blanco recuerda a su hijo como un apasionado por la naturaleza. «Sigue presente en cada pajarito que canta, en cada río que corre», dijo.
Eva Prendas Bustos afirma que ya no le quedan lágrimas de tanto que ha llorado desde el lunes 25 de noviembre cuando se enteró de que su hijo, Jean Franco Segura Prendas, había fallecido en el accidente aéreo de Pico Blanco.
«Tuve que reunir mucho valor personal para hacer esta entrevista. Pero sí creo que es justo poder hablar sobre mi hijo», expresó la vecina de Siquirres, Limón.
Prendas relató que el joven, de 28 años, estudió la carrera de Turismo en la Universidad de Costa Rica. «Se graduó como turismólogo. Adicional a su ocupación, era un apasionado de los pájaros y los anfibios. Compartió todas las bellezas de nuestro Caribe con muchos turistas extranjeros y nacionales. Tenía una gran pasión por la naturaleza, gran amor por el mundo, por toda la belleza escénica», expresó.
«Fue una persona llena de calidez. Fue un ser humano excepcional. Para su familia siempre tuvo una sonrisa, aún en los peores momentos, fue ese ser humano que te daba un abrazo y te decía que te amaba, que te daba palabras de aliento. Yo no sé de dónde sacaba el valor», añadió muy conmovida.
La madre aseveró que, por su forma de ser, muchas personas querían estar cerca de Jean Franco. «Estamos muy seguros que Dios tiene un ángel maravilloso en su presencia. sabemos que desde el cielo va a cuidar de todos los que lo hemos amado», resaltó.
«Franco sigue presente en cada pajarito que canta, en cada flor que florece, en cada río que corre, porque si hubo un apasionado de la naturaleza y de protegerla fue Franco. Nos enseñó a reciclar a reutilizar», agregó.
En su tiempo libre, al muchacho también le gustaba practicar ciclismo y, por su afición, seguía con atención las grandes competencias del mundo.
La vela de Jean Franco se realiza este miércoles en La Alegría de Siquirres y las honras fúnebres se efectuarán el jueves a las 10:00 a.m.
Viaje le preocupaba
En la entrevista con Columbia, Eva Prendas, dijo que Franco confiaba en que todo iba a salir bien en el vuelo hacia Tortuguero y en el retorno. A pesar de esto, unas fotos que su hijo le mandó le preocuparon pues se observaba mucha neblina. Se trataba de un viaje de inspección de amenidades turísticas.
Ella le pidió que hicieran la inspección lo más rápido posible antes que las condiciones climáticas fueran más desfavorables durante el regreso. Él le respondió que cuando llegara a San José le iba a escribir para avisarle. «Cuando pasaron dos horas y no me puso ese mensaje, yo sentí que me moría», indicó.
Tras la muerte de su hijo, doña Eva escribió un mensaje en redes sociales en el cual reprochó la realización del viaje, vía aérea, cuando en el país estaba bajo la influencia de un frente frío. Esta condición implicaba la presencia de lluvia, nubosidad y ráfagas de viento.
Prendas incluso mencionó que las empresas encargadas debían referirse al asunto. Lamentó que, a raíz de su mensaje, hubo algunas personas que hicieron comentarios hirientes en los que incluso la juzgaron, en medio de su tristeza y sin justificación alguna.
Aclaró que su intención es evitar que otras personas pasen por el mismo dolor que tienen las cinco familias que perdieron a sus seres queridos en el accidente.
«Y en las redes sociales…yo les pido por favor usémoslas para bien, para dar comentarios de aliento, para fortalecer, para compartir una palabra de Dios. Nosotros lo que queremos es que, de hoy en adelante, se tenga mucho cuidado a la hora de que se van a autorizar vuelos cuando el país atraviesa condiciones climáticas inestables», recalcó.
La Dirección General de Aviación Civil informó que el accidente está bajo investigación y que el proceso podría tardar varios meses.
Noticias Columbia intentó conocer la posición de la empresa turística y de la compañía de transporte aéreo pero, de momento, no ha sido posible tener alguna declaración.
