Sus propios familiares admiten que desconocían el paradero de joven al que se le vio por última vez en Tarrazú. La noticia de su fallecimiento golpeó con fuerza a sus entrenadores y personas cercanas
La muerte del jugador estadounidense de baloncesto, Jalen Hill, ha generado múltiples comentarios y, en especial, sorpresa.
En su país, allegados a la joven promesa del deporte (22 años) dejaron ver su dolor por el fallecimiento, luego de que el OIJ le realizó una autopsia y definió las causas como ‘indefinidas’.
Hill era visto por sus personas cercanas como inspirador, aunque hay pocas respuestas sobre por qué estaba en el país.
La última vez que se le vio fue en julio anterior en San Lorenzo de Tarrazú.
Según el medio ‘Los Angeles Times’, el jugador desapareció en Costa Rica y sus familiares desconocían su paradero.
“Sabemos que Jalen ha jugado un papel en la vida de tantas personas”, escribió su familia en una publicación realizada en su cuenta de Instagram.
“Mientras tratamos de navegar este momento devastador en nuestras vidas, les pedimos que nos den tiempo para llorar”, agrega la comunicación pública de los familiares.
Posición. La versión estadounidense de ESPN resaltó unas declaraciones ofrecidas por el entrenador de Hill, Mick Cronin, quien destacó su sonrisa y algunos rasgos de su personalidad.
Su muerte “es desgarradora, era un joven afectuoso con una gran sonrisa que nos dejó demasiado pronto”, recalcó.
Según los rotativos gringos, el joven fue una estrella en su colegio y, posteriormente, llevó al equipo de los Huskies a un juego de campeonato de la División Regional I, en su último año en 2017.
El entrenador del colegio, Josh Giles, recalcó que el joven “era un gran jugador de baloncesto, pero lo amaba como persona”.
“Estoy tan aturdido que ni siquiera tengo una emoción en este momento”, agregó a ‘The Times’.
Hill llegó a jugar en la universidad con el UCLA.
