¿Cómo se analiza en Guápiles que su equipo ocupe el sótano del certamen y, en cambio, el equipo tibaseño luzca solvente en el liderato con cuatro exjugadores suyos? Dirigencia sorprende con reacción coherente y pragmática.
El contraste es muy evidente. Saprissa lidera el grupo B con 20 unidades y un alto protagonismo de sus refuerzos y, en cambio, el Santos es el colero de la campaña con seis puntos.
Esta realidad llama especialmente la atención, pues los morados afrontan la campaña con cuatro futbolistas con pasado en Guápiles. Los canteranos Pablo Arboine y Youstin Salas (saltó de Grecia a la ‘S’) y los isleños Luis Paradela y Javon East.
Todos destacan por su buen desempeño en este certamen, en el que acumulan la mayoría de minutos posibles.
Sin los que fueron sus futbolistas, el club del Caribe afronta un contexto inverso, lleno de altibajos y con escaso protagonismo de los jugadores que llegaron al equipo para suplir a los morados.
La gran interrogante es: ¿Cómo asume la dirigencia santista este contraste tan claro? En su último día de gestión antes de dejar la presidencia del Santos, el histórico jerarca del club, Rafael Arias, respondió a esta duda.
Pudieron venderlos antes. Lejos de cuestionarse si el equipo debió hacer un esfuerzo mayor para sostener a estos jugadores, el dirigente percibe que más bien lograron alargar su estancia en el club, dado su destacado desempeño.
Quizás, el valor agregado es que la ‘S’ les pagó un monto económico por Paradela y East, un negocio que, en la generalidad, es positivo, pues pudieron irse ‘en blanco’ unos meses más tarde, cuando finalizaban su contrato.
“Muy feliz, muy satisfecho. El fútbol es una industria y como tal hay que verlo. Más bien se fueron tarde, tenían que haberse ido más antes. Qué lástima que no se fueron más antes, les hubiéramos sacado más dinero”, afirmo Arias.
Desde la perspectiva del dirigente, el Santos ya sabe lo que es vivir con este tipo de realidades, dado que cada dos años les toca reconstruir equipo casi desde cero, cuando les quitan a sus mejores futbolistas.
En esta oportunidad, la diferencia es que el equipo empezó muy mal campaña, al punto de que hoy es último del certamen. Recientemente, el club sacudió el plantel con la llegada de nuevos refuerzos y la salida de Giovanni Clunie.
“Y eso no es nuevo para el Santos, tener que hacer el equipo cada dos años, a los equipos que no tenemos el músculo económico nos sucede esto, pero estamos enfrentando la situación, pero el equipo está tomando medidas y algunos ajustes que no se dieron, entonces había que hacer el recambio”, concluyó Arias.
El dirigente dejará la presidencia santista para que asuma “Santos por Siempre”, un nuevo grupo que estaría cargo de la administración de esta institución, destacada por la formación de valores.
