Jerusalén, 18 sep (EFE).- El Ejército israelí insistió este miércoles en que está preparado para «cualquier misión» en la frontera con Líbano, después de que anoche explotaran miles de dispositivos buscapersonas del grupo chií Hizbulá, en una operación atribuida a Israel por la que la milicia libanesa ha jurado venganza.
«La misión está clara. Tenemos la determinación de cambiar la situación de seguridad lo más rápido posible», dijo el responsable del Comando Norte israelí, el mayor general Ori Gordin, después de que dos brigadas del Ejército completasen una serie de ejercicios para simular combates «en territorio enemigo».

Gordin insistió en que las tropas «están extremadamente preparadas para cualquier misión que se les asigne».
Israel lleva en máxima alerta desde anoche, cuando miles de buscapersonas presuntamente en manos del grupo libanés explotaron por todo Líbano y Siria, matando a doce personas e hiriendo a miles.
El incidente ha hecho saltar las alarmas por la posibilidad de que la tensión entre los chiíes e Israel, que llevan más de once meses enfrascados en un intenso intercambio de fuego a través de la frontera, desemboque en una temida guerra regional.
Las autoridades israelíes no han reconocido la autoría del suceso, algo habitual en este tipo de casos.
Israel lleva enzarzado en un intenso intercambio de fuego con el grupo libanés desde el 8 de octubre, cuando Hizbulá empezó a lanzar ataques en solidaridad con las milicias palestinas de la Franja de Gaza.
El martes pasado, Yoav Gallant, el ministro de Defensa, dijo que con sus «misiones» en Gaza casi cumplidas, el foco de Israel se está trasladando ahora a la frontera con Líbano, donde el constante fuego cruzado obliga a unas 60.000 personas a vivir evacuadas en hoteles o casas de familiares por todo el país.
En estos once meses de intercambio de fuego, más de 650 personas han muerto a ambos lados de la frontera, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 400 bajas, algunas también en Siria.
En Israel han muerto 50 personas en el norte: 24 militares y 26 civiles, incluidos 12 menores en un ataque en los Altos del Golán sirios ocupados.
Casi 3.000 heridos en un centenar de hospitales del Líbano, la mayoría en cara y manos
Beirut, 18 sep (EFE).- El ministro libanés de Salud Pública, Firas Abiad, aseguró este miércoles que un centenar de hospitales del país participan en la asistencia a los casi 3.000 heridos por las explosiones de buscapersonas y explicó que la mayoría de los pacientes sufrieron heridas en la cara o las manos.
«Hubo más de cien hospitales que nos ayudaron a recibir a los heridos, todos los hospitales en todas las áreas, incluido el norte. Los equipos médicos se quedaron toda la noche e incluso hoy aún siguen trabajando en las unidades de Ojos y Oídos del Hotel Dieu y el Roum», afirmó en declaraciones a la prensa durante una visita a centros hospitalarios.
El martes, un gran número de buscapersonas en manos de miembros del grupo chií libanés Hizbulá explotaron simultáneamente en diferentes puntos del país. La operación a gran escala atribuida a Israel causó la muerte a al menos nueve personas, entre ellas un menor, y heridas a otras casi 3.000.
Abiad apuntó que la mayoría de las heridas fueron en la cara, en concreto quemaduras que obligaron a realizar reanimación cardiopulmonar a los pacientes, y también en las manos, con «muchos» casos de amputación debido a las explosiones.
«Las heridas faciales son difíciles, porque es la área por la que respiramos, así que estos casos requieren un tratamiento especial», detalló el ministro, médico de profesión.
También recordó que hay más de 200 casos críticos, mientras que casi todas las heridas en los ojos fueron graves y espera que este mismo miércoles todos los pacientes que requieren intervenciones quirúrgicas sean sometidos a esas operaciones en los diferentes centros hospitalarios.
El balance de muertos, hasta el momento nueve personas, todavía puede aumentar y el Ministerio de Salud Pública espera anunciar una cifra actualizada en una rueda de prensa convocada para las 13.00 hora local (10.00 GMT), pues aún están «revisando» la evolución de algunos heridos.
«Lo más importante son los pacientes, como vimos, hubo un número masivo de heridos. Hubo casos difíciles que fueron trasladados a hospitales universitarios», reiteró el ministro.
En este contexto, las autoridades libanesas recibieron este miércoles 15 toneladas de suministros y también personal médico aportado por Irak para ayudar a tratar a las víctimas, mientras que Egipto, Siria o Turquía han ofrecido también su ayuda al Líbano, según Abiad.
El ministro realizó sus declaraciones tras realizar una visita al Hospital Roum, donde no se permitió el acceso a la prensa y a cuyas puertas se ha desplegado un grupo de militares.