Antes de que medio mexicano hiciera publicación sobre Costa Rica, Randall Zúñiga dijo que incurrir en ese tipo de acciones sería “darle poder” a los criminales.
El periódico El Universal de México publicó este miércoles una nota en la cual informa que el Gobierno de Costa Rica, presuntamente tuvo acercamientos con grupos criminales, ligados al narcotráfico en la búsqueda de contener los hechos violentos.
“Las fuentes, que hablaron con este diario en anonimato por seguridad, dijeron que a las contrapartes costarricenses de las mafias mexicanas del contrabando global de drogas se les habría pedido reducir la creciente violencia callejera y exhibir el fracaso de la seguridad a cambio de proseguir con el narcotráfico”, dice la publicación.
El presidente de la República, Rodrigo Chaves y el ministro de Seguridad, Mario Zamora, rechazaron el contenido de la nota periodística.
El mandatario la calificó como “patrañas” y el jerarca de Seguridad presentó una denuncia ante el Ministerio Público “para el esclarecimiento, hasta sus ultimas consecuencias, de la noticia criminis”, así como el trasfondo de la publicación.
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El pasado lunes, en el programa Hablando Claro, la periodista Vilma Ibarra consultó al director del OIJ, Randall Zúñiga, si en Costa Rica se ha incurrido en la práctica de acercarse a grupos criminales para “pactar” la disminución de la violencia a cambio de darles algunas libertades.
Ibarra hizo la consulta con base en preocupaciones que manifestó la expresidenta Laura Chinchilla, quien, en un foro sobre seguridad y crimen organizado, resaltó la importancia de poner atención a este tipo de riesgos.
“Yo esperaría sinceramente que esto no suceda aquí en Costa Rica. Sería una debacle, una catástrofe que autoridades, independientemente de donde sean, negocien con los delincuentes. Le están dando poder, le estarían dando un estatus que no es el correspondiente”, respondió Zúñiga.
“Yo esperaría que ninguna autoridad genere algún tipo de regalía o contubernio con grupos criminales porque a ellos los tenemos que atacar directamente. No podemos ceder para nada nuestra autonomía, nuestra autoridad para que ellos simplemente dejen de matarse y bajen las estadísticas artificialmente. Yo esperaría sinceramente que no”, añadió.
Aunque no confirmó que situaciones así estuviesen sucediendo en el país, el jefe policial mencionó que le llamaba la atención que, a la fecha de la entrevista, hubiesen transcurrido 20 días sin asesinatos en el cantón central de Limón.
“Cosa extraña que no había sucedido en los últimos meses”, aseveró.
Esa condición se rompió el martes cuando hubo un asesinato múltiple en la localidad de Villa del Mar.
