Entre enero, febrero y marzo del 2022, la Policía de Control Fiscal (PCF) decomisó 31.420.212 millones de unidades de cigarrillos por casos de presunto contrabando o defraudación fiscal. La cifra supera en 22 millones la que se registró en los mismos meses del año pasado.
Uno de los casos más recientes fue reportado por la Policía el pasado 28 de marzo. Ocurrió en Limón y el decomiso fue de 9.500.000 cigarrillos porque la mercancía no contaba con permisos para su comercialización.
La directora de la PCF, Jacqueline Soto, dijo que los números oscilan año con año, pero que este 2022 tiene un repunte en comparación con otros períodos.
Soto comentó que este año llevan tres decomisos en Limón de altos volúmenes que impactaron a las estadísticas. El perfilamiento de casos sospechosos es vital.
Los datos incluyen cargamentos decomisados por contrabando y los que caen por defraudación fiscal. La jefa policial explicó que, en el primer escenario, son productos que ingresan sin pasar por ningún tipo de control, mientras que en el segundo, puede haber algún trámite pero no se declara realmente la mercadería.
Las autoridades han detectado que la mercadería de procedencia irregular no solo se vende de manera informal como podría pensarse.
En el caso de las empresas que se vinculan con los decomisos, la Policía de Control Fiscal remite los casos al Ministerio Público para que se realice la investigación.
Foto: Policía de Control Fiscal.
