Fenómeno meteorológico ha dejado inundaciones, cortes eléctricos, caídas de árboles y a miles de personas evacuadas.
Steven Segura es un costarricense que vive en Clearwater, Tampa, una de las zonas más afectadas por el huracán Milton que arrasa la costa oeste de Florida.
Él, como miles de habitantes más en la zona, se vio obligado a evacuar su hogar junto a su familia para ponerse a salvo.
Segura conversó con Noticias Columbia y explicó el proceso que atravesó para llegar a un lugar seguro, en el mismo estado, pero a una zona en la cual no hubo impacto por el huracán.
Una de las mayores dificultades que enfrentó fue la escasez de gasolina en Tampa.
«El proceso estuvo rodeado de muchas dudas de si me quedaba en Tampa o salía de ahí. Esperé por horas, pero al último minuto una muy buena amiga costarricense, que radica en Miami, me dijo, ‘Steven, usted tiene que salir ya’ y me ayudó. Me dijo, ‘salga, por favor, vaya al norte o vaya al sur’. Hacia el norte está Atlanta, Georgia y si decidía irme al sur era hacia Miami. Tomamos la decisión a último minuto, donde ya era inminente la llegada del huracán Milton al área de Tampa. Una dificultad con la que me enfrenté fue que no tenía gasolina, tenía solo medio tanque de gasolina porque una noche anterior intenté poner y ya no había. Conseguimos un poco, pero en el transcurso del día tuvimos que gastar. Entonces, salimos de la casa con medio tanque de gasolina y, por las distancias, yo sabía que sí podía llegar con medio tanque de gasolina Miami y no a Atlanta, entonces nos vinimos hacia el sur», mencionó Segura.
El costarricense detalló que el camino hasta llegar a Miami no fue sencillo, ya que en la ruta atravesaron zonas en las cuales se estaba viviendo parte de los impactos del huracán.
«Muchas dificultades, porque ya no había agua, ya no había gasolina. De camino nos topamos varios tornados, que luego vimos en los medios de comunicación que destruyeron muchas casas y nosotros atravesamos algunos tornados de camino hacia Miami, los atravesamos manejando. Nosotros tomamos unas cuantas cosas, nada más cobijas y algo de comer. Así tomamos el camino hacia Miami sin rumbo, porque no teníamos nada nada reservado, pero gracias a Dios cuando llegamos a Miami pudimos conseguir algo, que una muy buena amiga nos ayudó. Aquí estamos bien, esperando que en nuestra casa al regresar estén las cosas bien, que no estén mojadas y lamentando lo que le haya sucedido a gente cercana, que se les inundó le casa, se cayeron algunos árboles», afirmó Segura.
Finalmente, el costarricense radicado en Estados Unidos mantiene incertidumbre sobre lo que será su regreso a Tampa.
Eso sí, indicó que es necesario retornar este mismo viernes debido a compromisos laborales y escolares de su familia.
«Yo no sé si hay agua y corriente en el área donde yo vivo, porque dijeron que la iban a desconectar a cierta hora, ya no íbamos a tener electricidad ni agua. Entonces, no sé lo que me espera a al regresar a mi casa, no sé si lo logre, no sé cómo estarán las carreteras. Sé que varios puentes, por la cercanía del océano a la carretera, estaban cerrados. Yo soy un trabajador de a pie y mañana tengo que regresar a trabajar, abrir el lugar donde yo laboro. No sé si ya abrieron, si el paso está habilitado, si el congestionamiento será demasiado fuerte, ya que muchas personas están regresando a Tampa, pero tengo que hacerlo. Necesito ir a trabajar porque la vida continúa, necesito alimentar a mi familia y ya ellas, el lunes, tienen que regresar a su respectivo colegio y escuela», agregó el costarricense.
Fotografía cortesía de EFE.
