(Video) Mediante chats y de puerta en puerta, vecinos se apoyan para buscar cisternas y cargar líquido
Depender del suministro en camiones y la enorme dificultad de realizar las actividades cotidianas, complican la vida de vecinos en varias comunidades de Tibás, Goicoechea, Moravia y San José.
Desde el pasado lunes comenzaron los reportes de que el agua tenía un olor y sabor extraño, el cual les parecía similar al que se percibe con combustibles. Además, sentían el líquido grasoso.
Este viernes, el Ministerio de Salud, AyA y Recope informaron que el problema se debe a contaminación por algún tipo de aceite y descartaron que se trate de gasolina o diésel.
Desde el jueves, Salud pidió a las personas que no consuman el agua ni la usen para preparar alimentos o higiene personal. Estas limitaciones han causado múltiples problemas a los vecinos. Noticias Columbia estuvo este viernes en Tibás, en San Juan de Tibás y las inmediaciones del estadio municipal para conversar con los afectados.
Marianella Rodríguez Rivera, comentó que en su barrio hay una alta cantidad de personas adultas mayores y algunas con enfermedades. “Es súper importante que esta situación se arregle”.
“En el caso de mi familia ha sido bastante complicado porque tengo una persona que es adulta mayor, de 83 años, que en estos días previos estaba preparándose para una colonoscopía, en la cual tiene que tomar mucha agua y comer comida especial”, mencionó.
Otra de las preocupaciones es que los camiones cisternas llegan a un punto fijo y hay personas que, por alguna condición particular, no pueden desplazarse al sitio. Por eso, los vecinos se organizan para ayudar a quienes enfrentan ese problema.
Olga Ovares, relató que a través de un chat de vecinos comenzaron a hablar de los problemas con el olor y el sabor de agua. Ahí se organizaron para reportar el problema al AyA. De igual forma, por la mensajería o de puerta en puerta, se comunican para saber dónde están los camiones cisternas que reparten el líquido.
Ovares dijo que una de las dificultades ha sido que escasea el agua embotellada en comercios de la localidad.
Katherine Valerín manifestó que los vecinos comparten informaciones en los chats aunque confesó que al inicio había mucha confusión y falta de certeza por las diversas versiones entre entidades públicas.
“Siento que han durado mucho. Desde el lunes debió haberse cerrado el agua por la salud de la ciudadanía. Ahora entonces comunicarnos entre todos los vecinos donde están los cisternas para seguirlos. Se agotó el agua aquí en Tibás, yo tuve que comprar en Belén”, resaltó.
Valerín dijo que es muy importante que se dé a conocer cuál fue la fuente de la contaminación debido a la gravedad del caso.
