Expertos señalan que estos movimientos surgen del descontento de los diferentes grupos sociales y que corresponden a un derecho dentro de una democracia.
Los recientes movimientos y protestas de distintos grupos sociales, como de los educadores, médicos especialistas, arroceros y demás, han dejado dudas sobre el manejo del Gobierno para atender estas demandas.
En Noticias Columbia conversamos con el docente de la Escuela de Ciencias Políticas y coordinador del Observatorio de Bienes Comunes de la UCR, Luis Sanabria, para comprender las implicaciones de esta situación.
Según el académico, existe una razón clara por la que se dan las protestas, no solo de grupos de interés, sino también de las propias comunidades, como el caso de Hatillo por el tema del agua.
“Cuando no se encuentran las respuestas, cuando no se atienden, cuando no se incluyen, cuando son ninguneados, cuando son desplazados de los espacios de toma de decisiones y demás, es precisamente en donde se tiene que recurrir, justamente, a la manifestación pública. Las protestas sociales son un derecho que deriva, precisamente, del derecho de participación que tienen los ciudadanos y las ciudadanas en cualquier democracia que se digne llamarse así”, explicó el experto.
De igual manera, Sanabria señaló que estos movimientos son importantes dentro de un país democrático como Costa Rica.
“Todas estas acciones colectivas, nos parezcan un chop suey o no o nos parezcan desordenadas o dispersas, son fundamentales para darnos elementos para interpretar la política que se está viviendo porque, como ustedes saben, el presidente tiene un canal directo de exposición, de interpretación de lo que está sucediendo. Si nos quedamos solo con ese canal, nos quedamos con una visión de poder determinada. En cambio, con las manifestaciones empezamos a ver las diversas interpretaciones que están sucediendo, las diversas vivencias que se están dando”, añadió el docente universitario.
Por su parte, el analista experto en comunicación política, Mario Quirós, indicó que los últimos gobiernos han tenido que enfrentar menos protestas.
Según el especialista, esto debería haberle dado a la actual administración un mayor margen de tranquilidad para manejarlas mejor políticamente, sin embargo, este no ha sido el caso.
“Cada vez que se ve una protesta, se ve que hay una crispación en torno más a la forma de la protesta que sí es un derecho, que está bastante regulado y normalizado sistema, pero dejando de lado los temas de fondo, que creo que es en lo que tenemos, sobre todo, que abocarnos. El manejo, yo diría que desde el punto de vista político, a mí en lo personal lo que me sigue preocupando es que los temas de fondo que están detrás de las distintas protestas siguen estando pendientes”, mencionó el analista.
Finalmente, Quirós aseguró que la comunicación del Gobierno ha fallado en el manejo de estas crisis.
“Aunque el estilo de comunicación del Gobierno puede decirse que es muy efectivo en ciertas circunstancias, para los manejos de crisis como esto, y lo digo como manejo de crisis en el sentido literal de lo que es de las estrategias de comunicación, sí nos revela que no existe una claridad en cuanto a los objetivos que se tienen. Me preocupa más porque cuando no se tiene claridad en cuanto a los objetivos de comunicación, puede deberse a que no se tiene claridad en cuanto a los objetivos de negociación y de mediano plazo, para no ser tan ambiciosos, que también se puedan tener para solucionar los temas inmediatos”, manifestó Quirós.
