Equipos hospitalarios trasplantaron 85 órganos de donante fallecido
Durante el 2024 se registraron 95 donantes fallecidos de órganos y tejidos, lo que permitió cerrar el año con un récord en la realización de estos procedimientos, dándole una segunda oportunidad de vida a los pacientes que los recibieron.
Según comentó el coordinador del Programa Institucional de Donación y Trasplantes, el doctor José André Madrigal, se logró llegar a cifras nunca vistas en la Caja Costarricense de Seguro Social.
Además, esto se logró gracias a que se logró reafirmar el mensaje de esperanza en medio del dolor que enfrentan las otras personas por el fallecimiento de su ser querido.
“Lo que permitió realizar 85 trasplantes de órganos y la obtención de 201 tejidos como córneas, piel, tejido músculo esquelético y vascular, lo que representa un aumento del 38% en donación comparado con el 2023, gracias a esto se realizaron 8 trasplantes de corazón, 7 de pulmón, 26 de hígado y 44 de riñón, siendo los máximos históricos de trasplantes de órganos de personas fallecidas realizados en 1 año en la institución”
Sin embargo, desde la Fundación Vida Nueva el mensaje no es tan alentador como el que busca dar la Caja.
Rosibel Arrieta representante de dicho movimiento comentó a Noticias Columbia que la donación y trasplantes en Costa Rica se han caracterizado en apariencia por actuaciones negligentes, entre otras.
“Por actuaciones negligentes, decisiones arbitrarias, débil planificación, control, supervisión y rendición de cuentas, donde el paciente no ha sido el centro de atención.
La cantidad de trasplantes realizados no da cuenta de una buena gestión porque detrás de estos números hay, entre otros:
• Muchas personas fallecidas a la espera de un trasplante por culpa de un sistema de donación y trasplante que en apariencia no ha sido efectivo.
• Una orden sanitaria que cierra un centro de trasplante a partir de lecturas erróneas sobre indicadores de gestión.
• Inexistencia de un sistema coordinado donde los grupos de trasplante se hablan y cooperan entre sí.
• Incumplimiento de acuerdos de Junta Directiva de la CCSS y recomendaciones de entidades como la Defensoría de los Habitantes o la misma Auditoría Interna de la CCSS.
• Aparentes abusos de poder por parte de las autoridades donde se toman decisiones al margen de la ley, la ética y los deberes como funcionarios públicos-
• Menor sobrevida y complicaciones en niños y niñas trasplantados en los últimos años.
• Incumplimiento de la ley No.9222 de Donación y Trasplante de Órganos y Tejidos Humanos de Costa Rica”
Actualmente por medio del Expediente Digital Único en Salud (EDUS) se puede expresar el deseo de convertirse en donante.
