El entrenador de Honduras, el colombiano Hernán Darío “Bolillo” Gómez, dijo este domingo, tras la derrota de los “catrachos” ante la selección de El Salvador por 0-2, que “ya no hay paciencia”.
Le agregó un “feliz noche, un abrazo para todos y hasta otra oportunidad”. Se levantó y se fue tras menos de dos minutos de conferencia.
Un “Bolillo” decaído se presentó para dar una escueta declaración a los periodistas diciendo que lo que se está viviendo en la selección “son momentos oscuros, donde ya no hay paciencia”.
De la mano del técnico colombiano el equipo de Honduras ha sufrido cuatro derrotas, a las que se suman otras tres e igual número de empates bajo la dirección del uruguayo Fabián Coito, quien fue separado del equipo en octubre de 2021, por malos resultados.
Gómez subrayó que en la vida llegan momentos que “no son oportunos” y que “la paciencia se le agotó a todo el mundo”.
“Pasa de una situación agradable a una donde ya no hay respeto y somos señalados por lo que está ocurriendo”, enfatizó el “Bolillo” Gómez, en alusión tácita a los periodistas, a quienes les expresó que no tenía nada más que decirles.
Algunos periodistas han dejado entrever que, con sus declaraciones, Gómez estaría eventualmente dejando la selección hondureña, aunque cuando se le contrató se estableció que continuará al frente del equipo nacional, al margen de lo que pase en el octogonal de la Concacaf, y pensando en el mundial de 2026.
“Hemos trabajado, pero no nos salen los resultados”, apostilló Gómez.
El timonel de la H sorprendió hoy con siete cambios en la formación titular, además de cambiarle la posición a algunos de los jugadores, y dejando entre los suplentes a los principales goleadores de Honduras, Alberth Elis, Rommel Kioto y Anthony Lozano.
Elis y Kioto entraron en el segundo tiempo, pero no pudieron contra la férrea defensa que plantó El Salvador, que logró un triunfo histórico ante Honduras, el primero de visita en partidos de eliminatorias mundialistas.
