Debido al faltante de dinero, entidad financiera presentó denuncia ante la Fiscalía contra cinco funcionarios.
La mañana de este martes, altos funcionarios del Banco Nacional reconocieron “una diferencia contable entre los registros y el dinero (en efectivo) existente en custodia” en la sede central ubicada en San José. El monto corresponde a ₡3.293 millones de colones.
Por estos hechos, la entidad financiera presentó una denuncia contra cinco funcionarios por los presuntos delitos de peculado e incumplimiento de deberes.
Se trata de dos supervisores del área, un técnico, un custodio y un contador. “Tenían a su cargo las funciones de ejecución y fiscalización directa del área Administrativa de Numerario”, dependencia donde se maneja el efectivo.
El gerente interino del Banco, Jaime Murillo (al centro en la foto), dijo que estos trabajadores se encuentran suspendidos de sus cargos con goce de salario, pues quitarles ese beneficio podría consistir en una “sanción anticipada” en un caso que está bajo investigación.
Murillo dijo que, a pesar de que se trata de un monto muy elevado de dinero, no pone en peligro la estabilidad financiera de la entidad ni compromete el patrimonio de los clientes.
¿Qué pasó?
A inicios del mes de octubre, como parte de actividades de control, se realizó una revisión a un área específica conocida como Administración del Numerario.
“Lo que se detecta inicialmente es que, de acuerdo con el registro contable, versus lo que uno de los custodios tenía bajo su custodia, pues tiene un faltante de efectivo que supera los 3.200 millones de colones”, dijo Murillo.
“Esa diferencia hay que reconstruirla, hacia atrás, devolviéndose día con día porque podrían haber efectos contables, una mala operación o algún tema incluso de los sistemas de información que hayan, de alguna u otra forma, impactado esa cuantía”, añadió.
¿Fue sustraído el dinero?
Debido a que la explicación se enfocaba en esta diferencia contable, Noticias Columbia consultó al gerente si el dinero se puede dar por “sustraído” o si aún es prematuro aseverarlo con esa contundencia.
“Usted tiene un saldo que debería tener según la contabilidad y tiene un saldo real de acuerdo con el físico. Hacer el arqueo significa comparar esas dos cosas y deberían ser lo mismo. Entonces, sí hay una diferencia, a uno de los custodios, lo que pasa es que, en este momento, dado el proceso, el adelanto y hasta donde vamos con la investigación, no podemos declarar que esos 3.293 millones sean un fraude y que alguien se los robó en efectivo ya demás que los sacó de esta o aquella forma. Eso no lo tenemos, no estamos ahí todavía”, respondió.
El Banco comenzó un proceso de “reconstrucción contable”. El gerente aseguró que, por ahora, “no hay un indicio certero sobre cómo se pudo haber extraído el dinero, si es que realmente se extraía”.
El proceso implica revisar todos los movimientos de las posibles personas involucradas durante todo el plazo de interés.
Murillo expresó que el área en cuestión, es monitoreada con cámaras y tiene controles muy estrictos de ingreso y salida.
“Tenemos la presunción de que salir libremente con una bolsa de efectivo o lo que sea, de acuerdo con los controles que están establecidos, no es posible. Es un área en donde usted no puede entrar con nada que se parezca a una bolsa o a un bolso, ni siquiera el bolso del almuerzo puede meter”, destacó.
Adicionalmente, a la salida de labores, los trabajadores son sometidos a una revisión.
Ante consulta de Noticias Columbia, la Fiscalía informó lo siguiente:
“La Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción (FAPTA) indicó que abrió de oficio una causa para investigar la presunta sustracción de 2 mil millones de colones de las bóvedas del Banco Nacional. La FAPTA informó que el caso se desarrolla bajo el expediente 23-000369-1218-PE, por el presunto delito de peculado, y se tramita contra ignorado, lo que quiere decir que por el momento no existen personas individualizadas como imputadas”.
