El asistente técnico de Douglas Sequeira en San Carlos, el uruguayo Víctor Abelenda, reconoce que “ganar te da una tranquilidad para poder trabajar el siguiente partido”.
Empero, no salió del todo conforme tras la victoria 0 a 2 sobre Pérez Zeledón y de visitante. Y es por eso que no se confía de cara al choque de este miércoles contra Puntarenas en el Carlos Ugalde.
Es un juego trascendental para los norteños, que están terceros en el Grupo B, a cuatro puntos de los porteños y solo uno por detrás del sublíder, Saprissa.
“Pérez Zeledón no es lo mismo de lo que vamos a enfrentar contra Puntarenas. Contra Pérez Zeledón sufrimos en algunos momentos en lo que no tuvimos que haber sufrido tanto. Cuando quedamos con un hombre de más tuvimos que presentar cosas más buenas de lo que tuvimos el otro”, reseñó con alta dosis de autocrítica.
Sabe lo vital que sería sacar los tres puntos en el Carlos Ugalde.
“Sabemos que es un partido denominado final. Necesitamos estar muy claros. Sabemos todo lo que nos jugamos en este partido”, reseñó. “Sin salirnos de lo que queremos, sabemos que va a hacer un partido de vida o muerte. Acortaríamos distancia con ellos, obligaríamos a Saprissa y luego juegan entre ellos. Y nosotros iríamos a Cartago a un juego importantísimo”.
Eso sí, quiere que el Carlos Ugalde se sienta como el Carlos Ugalde y no se disfrace de Olla Mágica, como se le conoce al “Lito” Pérez, sede de Puntarenas.
A Abelenda le preocupa que lleguen más chuchequeros que norteños a un partido tan importante.
“Necesitamos que estas graderías estén teñidas de rojo y no de naranja. Hemos visto como la afición de Puntarenas está llegando a los estadios. Ese es un envión anímico y nosotros necesitamos que sea al revés”.
